El cuadro de la Virgen de Chiquinquirá fue quizá la obra más venerada en el país durante la Colonia. Aunque diversas representaciones artísticas de la emblemática patrona de los colombianos se exponen hoy en varios museos colombianos, la más famosa, sin duda, es la que el artista Alonso de Narváez pintó en 1562 y que hoy permanece en la Basílica de Chiquinquirá.Su importancia, explica el crítico de arte Halim Badawi, “radica en su carga religiosa, más que en el arte”, pues en una época en la que el arte fungió como principal evangelizador, la Virgen de Chiquinquirá llegó a tener tanta influencia, que incluso ahora sigue siendo objeto de romería por parte de miles de devotos.De hecho, el próximo 7 de septiembre el mismo papa Francisco será quien la venerará. Por petición explícita del Vaticano, el cuadro viajará de Chiquinquirá a Bogotá y durante algunos días, los capitalinos tendrán la oportunidad de verlo en la Catedral Primada.La obra será transportada en medio de un gran operativo de logística. El cuadro que pesa 30 kilos volará a la capital del país en un helicóptero Mi-171, un modelo que puede soportar cuatro toneladas internas, similar al que se usó en 2008 durante la Operación Jaque, en la que el Ejército rescató a 15 secuestrados por las Farc, entre ellos a Íngrid Betancourt y a tres ciudadanos gringos.Puede leer: El silencioso guardián de la Virgen que viajará en helicóptero a su encuentro con el papaSegún Fray Nelson Novoa, rector del Santuario Mariano Nacional de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, el amplio y cuidadoso despliegue del traslado de la virgen a Bogotá, “se debe a que el lienzo de la virgen está muy ligado a la historia del país”.Servientrega, empresa encargada del transporte, también destinó un equipo de 80 personas, entre diseñadores industriales, mecánicos, personal de seguridad y administradores para garantizar la seguridad del envío. “Se construyeron carritos especializados para cargar la obra hasta el avión y, por ejemplo, la fase de diseño y construcción del embalaje, duró un mes”, aseguró Lorena Quintero, la diseñadora industrial encargada de construir el guacal en el que se transportará la Virgen.Para garantizar que la obra no se deteriore, el equipo de ingeniería construyó un guacal de pino con acabados en barniz ignífugo. Por dentro, el empaque llevará dos tipos de espuma para reducir las vibraciones del transporte y amortiguar cualquier golpe, mientras que en su exterior, la caja llevará impresa la imagen de la Virgen de Chiquinquirá con la frase “Una entrega de amor”.Con el fin de que los pobladores y visitantes puedan despedir a la Virgen en Chiquinquirá, se tiene prevista una procesión el primero de septiembre que partirá de la catedral de Chiquinquirá hacia el estadio de fútbol de la ciudad. Desde allí saldrá en helicóptero rumbo a Bogotá para su encuentro con el papa Francisco el 7 de septiembre.Puede interesarle: Prográmese para conocer al papa Francisco en su visita a ColombiaOtros detalles sobre la peregrinación de la Virgen de Chiquinquirá a Bogotá:El guacal irá dentro del helicóptero en posición vertical y estará asegurado con amarres en forma de malla que estarán anclados a la cabina de carga. Lo que evitará que se mueva por la vibración.A su llegada a la capital, el helicóptero aterrizará en el interior 12 del centro logístico de Servientrega. La obra pasará a un camión y será transportada a la parroquia de Santa Viviana.El 2 de septiembre habrá una procesión para trasladar el cuadro hasta la Catedral Primada de Colombia.El soporte donde será exhibido el cuadro viajará vía terrestre y tendrá una logística diferente. Llegará unos días antes a la ciudad de Bogotá.El cuadro estará custodiado por el Batallón Guardia Presidencial mientras esté en Bogotá.El cuadro permanecerá en la capital hasta el 10 de septiembre con el fin de que todos los fieles tengan la oportunidad de visitarlo.