Aunque no hay una cuantificación exacta aún del número de hectáreas incineradas, la descripción que hicieron los técnicos de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), tras desplazarse a la vereda de Tinzuque, en el municipio de Soacha, a realizar el balance del incendio forestal, da muestras de la magnitud del evento.
El regreso de los incendios forestales sería una noticia negativa, luego de la experiencia que se vivió en la capital del país durante la temporada de sequía que trajo consigo el Fenómeno del Niño.
Ahora, cuando se supone que ya debió entrar el evento climático contrario, con algo más de lluvia, mientras entra en su plenitud la Niña, se vuelven a encender las alarmas.
En Soacha, de acuerdo con la dirección regional de la CAR, que hizo el recorrido por la zona, la afectación es inmensa.
Los técnicos y profesionales que acudieron al lugar, evidenciaron que, aún en este 7 de agosto, fue necesario utilizar herramientas para desactivar los últimos puntos calientes de la conflagración que se inició el fin de semana.
La ingeniera Pilar Rengifo de la CAR detalló que, inclusive, observaron plumaje incinerado, que indica que: “Las llamas arrasaron con avifauna y también evidenciamos frailejones quemados de más de un metro de altura”.
La conflagración está controlada en el 90 %, dijo la ingeniera de la CAR. Pero el monitoreo tendrá que continuar, no solo para evitar que se vuelvan a avivar chispas que han quedado bajo la devastación de la flora, sino para evaluar los daños ocurridos en el lugar, en el cual, oficialmente, se sabe que hacen presencia especies como el mosqueral rojo.
Según lo hallado por los técnicos de la CAR, dicha especie habría sufrido estrés y migración a la parte baja del cerro.
Además, como por el momento el balance se sustenta en las presunciones de los expertos, también habrían resultado afectadas especies de insectos que son propios de los ecosistemas altoandinos como abejas y mariposas. Todas ellas son claves dentro del engranaje de la naturaleza.
Ya se han dado otros casos
En lo corrido del año, según Cuerpo Oficial de Bomberos, se han registrado tres incendios con un área de afectación mayor a diez hectáreas y 13 de 1 a 3 hectáreas.
La CAR hizo un llamado a la ciudadanía a participar en la conservación de estas áreas protegidas que son determinantes para la tenencia de agua, pues no se puede olvidar que los frailejones son reservorios en el ecosistema de páramos.
Denuncie
La autoridad ambiental en la región recordó que actividades de ganadería y agricultura no están permitidas en estas áreas, por lo tanto, invitó a la comunidad a denunciar prácticas como el descargue de basuras, las quemas y el uso de cualquier tipo de material combustible que pueda poner en riesgo los recursos naturales.
Más aún, en medio de un panorama de escasez de agua, como efecto del cambio climático, en el que es decisiva la conservación de plantas, animales y toda la biodiversidad necesaria para la preservación de la raza humana.