Cuando se podría pensar que no cabe otro escándalo en la cárcel La Picota, ahora el mismo Inpec, a través de sus grupos de operaciones especiales, logra una importante incautación, que incluye sin explicación los electrodomésticos de cualquier trasteo, además del inventario de un bar de mala muerte.

El Inpec explicó que durante la madrugada llegaron a varios pabellones de La Picota para sorprender a los internos, que por meses acumularon ciertos lujos no permitidos en el penal, y que incluyen, por ejemplo, televisores, estufas freidoras y neveras. Además de cientos de botellas de licor, celulares, parlantes y tablets que eran usados en fandangos privados.

El Inpec adelantó un operativo en la cárcel La Picota en el sur de Bogotá. Los hallazgos parecen sacados de un remate en un Gastrobar. | Foto: Inpec

Las incautaciones fueron ordenadas por la dirección del Inpec como parte de una estrategia para identificar los elementos prohibidos y que irónicamente estaban, o se movían, con libertad en la cárcel que se supone es la más de segura del país y con los mayores controles.

“El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) se permite informar que, en un procedimiento ordenado por el director general al Complejo Penitenciario y Carcelario de Bogotá La Picota se lograron incautar elementos de prohibida tenencia por parte de los Grupos especiales, quienes adelantaron un operativo sorpresa”, señaló el Inpec una vez se conocieron los resultados del operativo.

SEMANA pudo conocer los detalles de esta intervención del Inpec que dejó en inventario un total de 132 celulares, cinco tabletas, 19 parlantes, 184 botellas de licor, cuatro relojes inteligentes y más de 400.000 pesos en efectivo. Además, y resulta irrisorio, se encontraron electrodomésticos, “entre los que se destacan televisores, cafeteras, licuadoras, DVD, estufas y neveras, los cuales están prohibidos dentro de los pabellones”.

El Inpec adelantó un operativo en la cárcel La Picota en el sur de Bogotá. Los hallazgos parecen sacados de un remate en un Gastrobar. | Foto: Inpec

Hace algunos meses quedó al descubierto cómo en el pabellón de extraditables se tenían planeadas suculentas fiestas con comida exótica y tragó de sobra. Un cargamento de hamburguesas, mariscos y carnes, que fue descubierto antes de ingresar al pabellón, pero que reveló cómo al interior del penal los llamados extraditables tenían su propio menú y un chef que convirtió su paso por la cárcel en un hotel gastronómico.

Ahora, y como parte de los controles que implementó el Inpec para identificar y eliminar esa clase de beneficios, se adelantó el operativo en la madrugada de este martes con los resultados que se presentan al país y con la sorpresa de encontrar este trasteo entre las celdas en las que -se supone- solo debe estar un colchón y un baño.

“Desde la Dirección General se seguirán adelantando estos operativos sorpresa tanto en La Picota como en otros establecimientos, con el fin de determinar acciones irregulares y tomar las medidas necesarias que permitan combatir actos de corrupción al interior de los penales del país”, dijo el Inpec.

El Inpec adelantó un operativo en la cárcel La Picota en el sur de Bogotá. Los hallazgos parecen sacados de un remate en un Gastrobar. | Foto: Inpec

El asunto ahora implica conocer, y será materia de investigación, cómo ingresaron estos elementos al penal, pues claramente no aparecieron de un momento a otro, alguien de la guardia o personal de custodia permitió su ingreso, lo que lleva a otras medidas de carácter interno que incluye averiguaciones y, de hallar responsables, capturas en el marco de proceso penales.