En las últimas horas y bajo absoluto silencio y cuando la noche le caía encima, el poderoso sindicalista de la Unidad Nacional de Protección (UNP), Wilson Javier Devia Pérez, salió del país justo cuando se acercaba la hora cero para la audiencia de imputación de cargos por la literal “olla podrida” que se ha venido destapando en la entidad que va desde el alquiler ilegal y por debajo de cuerda de esquemas de seguridad, el transporte de droga y de criminales en las camionetas de la entidad y hasta falsos blindajes.

Wilson Devía, sindicalista de la UNP, en audiencia de imputación de cargos. | Foto: Captura de video

Para este martes a las 10 de la mañana estaba convocada la audiencia de imputación de cargos contra Devia por ser el presunto cerebro de los gigantescos hechos de corrupción que están carcomiendo la entidad, pero finalmente la audiencia se aplazo porque el mismo Devia recusó a la fiscal Angélica Monsalve.

Unidad Nacional de Protección, UNP. | Foto: Colprensa

Sin embargo, según pudo confirmar SEMANA, Devia salió del país con rumbo a Miami, en los Estados Unidos. Aun no es claro si presentó una excusa o justificación para no asistir a la audiencia de imputación, pero también es claro que el sindicalista no tenía ninguna orden de captura y podía moverse con libertad.

Tras la instalación de la audiencia, y el reclamo presentado por la delegada de la Fiscalía General, Devía Pérez manifestó que por motivos de seguridad no podía revelar donde se encontraba. “Su Señoría, actualmente soy una persona con unas medidas de seguridad, con un riesgo extraordinario del Estado y por temas de seguridad me abstengo de decir en público el lugar donde estoy por temas adversos a mi seguridad”.

Casualmente, el pasado lunes, la defensa del sindicalista presentó una nueva recusación en contra de la fiscal que adelanta la investigación al considerar que se extralimitó en sus funciones a la hora de adjudicarse el expediente para convocarlo a la audiencia de imputación de cargos por concusión abuso de función pública.

En Colombia cerca de 7.500 personas cuentan con esquema de protección. ¿Qué pasará con las personas que están en una situación crítica de riesgo?

La defensa del sindicalista citó además unas publicaciones de la fiscal Monsalve en su cuenta de Twitter, donde tiene más de 20 mil seguidores, haciendo señalamientos directos contra Devia y el escándalo de corrupción en la UNP. Con estas publicaciones, se insiste, vulnera el debido proceso por lo cual se debe hacer un nuevo reparto del expediente.

“(...) muestran su interés de intimidarme, de dañar mi nombre y mi honra ante la sociedad, lo cual afecta también mi trabajo al interior de la Unidad Nacional de Protección, pues esta Unidad replicó la información presentada por la Fiscal Monsalve Gaviria, reitero, de manera ilegal, en mi contra en una red social”, advierte la recusación de nueve páginas.

La explosiva grabación contra Devia

La caja de pandora de la corrupción en la UNP se abrió cuando fue capturado Manuel Antonio Castañeda, hoy conocido como el narcochofer, quien fue encontrado transportando cocaína en una camioneta de la entidad y ahí empezó a conocerse la corrupción que carcomía la entidad.

Manuel Antonio Castañeda, era el conductor asignado al esquema de seguridad del exsubdirector de la entidad Ronald Rodríguez Rozo, y cayó con un cargamento de cocaína en una carretera del Cauca, es el principal testigo de una poderosa red de corrupción enquistada en la entidad desde hace varios años. Según las primeras informaciones, estaría liderada presuntamente por Wilson Devia, presidente de uno de los 19 sindicatos de la entidad.

Las denuncias de Castañeda fueron recibidas semanas atrás por el propio director de la entidad, Augusto Rodríguez, quien ante la gravedad de los hechos y las pruebas entregadas decidió trasladarlas de urgencia a la Fiscalía General de la Nación.

Como se recordará, la UNP se declaró víctima en los procesos de investigación que se adelantan sobre los llamados ‘carteles de contratación’ de vehículos blindados.

En su relato, conocido en exclusiva por SEMANA, Castañeda reveló que en la Unidad Nacional de Protección existe una organización criminal en la que estarían comprometidos algunos presidentes de sindicatos, funcionarios, exfuncionarios de la entidad y contratistas.

Castañeda es un expolicía que se dedicó durante años a la promoción de artistas de música popular. En ese oficio, asegura, fue secuestrado y extorsionado por alias ‘Jhon 40′ en los Llanos Orientales, por lo cual tuvo que conformar un esquema de seguridad que le costaba 15 millones de pesos mensuales.

En esas circunstancias, dijo, conoció en el 2019 a Wilson Devia, presidente de uno de los sindicatos de la Unidad Nacional de Protección y analista en la Subdirección de Resgo de esa entidad.

Castañeda asegura que Devia le alquiló un esquema de seguridad que estaba asignado por esa entidad a un protegido firmante de los acuerdos de paz del 2016 con las Farc, identificado como Yesid Torres, por un valor de 7 millones de pesos mensuales, más un millón de pesos mensuales para combustible.

Devia, dice Castañeda, distribuía el dinero con los escoltas y el protegido. El esquema incluía vehículo blindado, escoltas, mantenimiento y combustible.

Castañeda tuvo el esquema durante algún tiempo y luego se lo entregó nuevamente a Devia.

Curiosamente, el vehículo que tuvo Castañeda fue detenido posteriormente con 400 kilos de marihuana.

Para sustentar esta y otras denuncias más, Castañeda le entregó al director de la UNP grabaciones y documentos que comprometen seriamente a Devia.

“Lo que sí cobramos es el 10 por ciento de lo que facturen”

SEMANA tiene en su poder una reveladora grabación telefónica entre Manuel Antonio Castañeda y Wilson Devia, en la que se habla de la compra de unos vehículos por parte de un artista llamado ‘Joaco’ y quien estaría dispuesto a alquilarlos a la UNP.

En la grabación, Devia revela el monto de la ‘coima’ que cobra por meter los carros a trabajar a la UNP e incluso se compromete a enviar los vehículos contratados a zonas donde no les den tanta “pata”, pues dice que pierde dinero si el carro se daña pronto.

El poder del presidente de este sindicato en la Unidad de Protección es evidente. Esta es la transcripción de la grabación obtenida por SEMANA:

MANUEL ANTONIO CASTAÑEDA (M.A.C.): Ahí fuimos a ver los vidrios...

WILSON DEVIA (W.D.): Cómo le fue...

M.A.C: El cuchito nos enseñó ahí los vidrios y eso. Pero el viejo resultó llamando a un tal Fabio y el viejo ya le elevó mucho. Ccuando llegamos ahí, ya no eran los mismos precios sino más elevados y decía que eso tocaba con Fabio, con Fabio y con Fabio...

W.D.: ¿Y quién es Fabio?

M.A.C.: Bueno, pues no sé, pero ahí el cucho marica habló de eso y nosotros no le paramos bolas y pues Joaco miró los vidrios.

W.D.: No, pues vamos a otro lado, no, ¡tan guevón!

M.A.C.: No, pues sí, igual ahí miró los vidrios y el man le dio los precios y yo le dije que pues yo hablaba con usted a ver a qué precio les dejaban los más baratos.

W.D.: Sí.

M.A.C.: Yo, sin embargo...

W.D.: ¿Y qué dijo?

M.A.C.: No, pues marica yo los llevé a otra bodega ahí de otro amigo y pues el man por allá le ayuda conseguir unas camionetas, entonces, esas que él está necesitando para comprar...

W.D.: Sí.

M.A.C.: Entonces, el amigo este que yo tengo se comprometió, que se las dejaba y que se las va a comprar al man, una Runner y una Lexus, eso…

W.D.: ¿Blindadas?

M.A.C.: No, no, no convencionales...

W.D.: Ah bueno.

M.A.C.: Eso, y pues Joaco, ahí sí, como yo hablé maravillas de usted, entonces el man me dijo: ‘marica, ¿y el tema de las camionetas cómo es? Será que es que el man me tira muy duro, que no sé que’. Yo le dije: ‘No marica, el man es bien, pues obviamente tiene que ganarse un porcentaje, le dije pero el man dijo: ‘Será seguro que él sí las mete, no sé qué'. Yo le dije que sí, que usted ayudaba...

W.D.: Pues esas las entro porque las entro, usted es como marica, si le estoy diciendo que sí…

M.A.C.: No, no, yo le dije ahí marica, yo le dije el man es bien, por ahí dijo que iba a ver si compraba unas a un man de Medellín, pa ver si se las metía a trabajar ahí.

W.D.: Lo que sí cobramos es el 10 por ciento de lo que facturen, guevón, eso sí no…

M.A.C.: Espere hago cuentas, el diez por ciento, ¿cuánto es el 10 por ciento?, ¿cuánto es que usted dijo? Él piensa comprar 2018, 2019...

W.D.: Ah no, un milloncito de pesos por cada camioneta guevón, eso no es nada y él paga 10.500.000...

M.A.C.: Ah bueno, eso, al man le sonó la idea, dijo que iba a ver si se compraba unas camionetas y las metía a trabajar ahí, pero que si las asignaban a esquemas muy patones o que si se podia darle manejo, yo le dije, a este marica se le da la ponchera y el man nos ayuda pa una buena ciudad, pa que no le den tanta pata.

W.D.: Claro, si no, no, no... Eso las organizamos, mijo.

Que a mí no me sirve mandar una camioneta donde le vayan a dar pata, donde se la van a tirar, porque la sacan de trabajar, la dejan quieta y yo no produzco.

M.A.C.: Ahhhh, no, él dice: yo le boto la ponchera al man de lo que pide, pues que obviamente Manuel me la deje trabajando, en un buen lugar, marica, no que le den pata.

W.D.: Eso las dejamos en buenos sitios. Organizamos para que de hecho quede con los escoltas del sindicato para yo poderlos apretar.

M.A.C.: Eso, marica, pues ya el man, marica, él dijo que iba a ponerse a la tarea de eso y que me cantaba la zona y que le había caído muy bien...

W.D.: Nooo, ese hijueputa, que el próximo concierto que haga me invite para escucharlo cantar… que me gusta… guevón, eso así a palo seco, y en video de youtube, la magia de los micrófonos hace que eso se cante bien bonito, y cuando uno va a ver el artista chimbo.

M.A.C.: Nooo, el man es muy bueno, ese hijueputa es 100 por ciento bueno, lo que pasa es que ahorita no hay eventos, conciertos como tal hasta marzo, marica . Ya en febrero porque enero ya se fue. Febrero está quieto, pero si apenas el man haga un evento yo le digo.

W.D.: Claro, eso es lo que toca decirle. Bueno, pero en conclusión fueron allá a los vidrios y consiguieron por otro lado, que es lo importante, ¿sí? ¿Solucionaron el problema?

M.A.C.: Sí, el man lo va a hacer allá en donde un amigo de una empresa, una que queda en la 80, pues el man está es esperando que le entreguen, como se supone que hoy le entregaban el carro del concesionario, no le alcanzaron a entregar la matrícula, entonces está esperando eso y lo hace allá donde el otro man que le llevé yo.

W.D.: Ahh bueno, ¿o sea no hicieron negocio con el señor de acá?

M.A.C.: No, con el de ahí, no, no, no. No llegaron a ningún lado. Al man, marica, se le subió. Imagínese que él que pidió 8 millones, estaba pidiendo 12, 14 millones, entonces el marica ya como que no le gustó eso.

W.D. Nooo, 14 millones quería era brindarle todo el carro, guevón.

M.A.C.: Noo, si eso es lo que le pidió el man, marica, 14 millones cuando esta mañana a mi me pidió 8, entonces Joaco no le gustó eso.

W.D.: Nooo, falta de seriedad, qué cagada hermano, pero ahí sí dijo el burro, se me sale de las manos.

M.A.C.: Noo, pero hágale gracias por la gestión y pues esperemos a ver qué me dice este marica y yo le canto la zona.

Esta grabación y otras más con documentos y evidencias documentales se encuentran en manos de la Fiscalía que abrió en las últimas horas una investigación formal con el fin de establecer quiénes más estarían detrás de la poderosa red de corrupción liderada presuntamente por el sindicalista Wilson Devia.

SEMANA conoció que por tratarse de un testigo estrella con valiosa información, que ya estaba en manos del director de la Unidad Nacional de Protección y de la Fiscalía, se pidió el traslado el traslado de Castañeda a Bogotá pues se teme por su vida.

El exsubdirector de la entidad, Ronald Rodriguez Rozo, tendrá que explicarle a las autoridades por qué razón uno de los vehículos asignados a su protección terminó con un cargamento de 150 kilos de cocaína en su interior cuando se movilizaba por las carreteras del Cauca.