En las cinco semanas transcurridas desde que comenzó la invasión rusa a Ucrania el 24 de febrero, más de 4 millones de personas se han visto obligadas a huir del país.

Mientras tanto, los desplazados internos en toda Ucrania se han visto sometidos a un estado de terror constante debido a que las fuerzas militares rusas han atacado sus hogares, hospitales e infraestructuras esenciales, al tiempo que han restringido los esfuerzos de ayuda humanitaria.

Miles de voces se han sumado en solidaridad con Ucrania, incluida la vicepresidenta y canciller Marta Lucía Ramírez, quien se unió posteando una foto suya con la bandera de Colombia detrás a la campaña “Stand Up for Ukraine” (De pie por Ucrania), que incluye una protesta global en las redes sociales, con la que se pretende movilizar miles de millones de dólares para hacer frente a la crisis en Ucrania y apoyar a las personas que se desplazan por todo el mundo.

Sin embargo, este pronunciamiento no le salió del todo bien a la canciller, pues muchos internautas le reprocharon que no hiciera estos mismos pronunciamientos en favor de temas que ocurren en Colombia.

Uno de los más críticos fue el candidato presidencial Sergio Fajardo, quien contestó: “¿Y para cuándo #StandUpForPutumayo, vicepresidenta?”.

El candidato presidencial y exgobernador de Antioquia hacía referencia a lo ocurrido hace algunos días en Puerto Leguízamo, Putumayo, donde en una operación del Ejército murieron 11 personas.

Mientras el Ejército y el Ministerio de Defensa han asegurado que las personas muertas eran disidentes de las Farc y narcococaleros, pobladores de la zona y organizaciones de derechos humanos han manifestado que dentro de los fallecidos había población civil y que los uniformados habían disparado presuntamente a sabiendas de que allí había personas no vinculadas con el conflicto ni con grupos ilegales.

Una de las críticas que se han hecho es que los uniformados al parecer habrían movido algunos de los cuerpos antes de la llegada del CTI.

Sin embargo, los militares que participaron de la operación aseguran que, con el permiso del CTI, habrían tenido que mover dos cadáveres que quedaron sobre un barranco a punto de caer a las aguas del río Putumayo. Y niegan que hayan alterado la escena de los hechos.

Pero ese día en Altos del Remanso, donde ocurrió el hecho, las cosas no terminaron tras el fin del cruce de disparos entre supuestos disidentes y miembros de la Fuerza Pública.

Hacia las 4:30 p. m. se habría presentado un intento de asonada de algunos miembros de la población civil. Integrantes del cuerpo de asalto que realizó la operación les dijeron a los investigadores que la situación se puso tan complicada que tuvieron que obligar a la comunidad a ubicarse en la cancha principal porque había temor de que hubiese más personas armadas en las casas, ya que todos habían estado de civil, tanto los pobladores como los presuntos disidentes de las Farc. Así lo prueba una fotografía en la que un militar se ve custodiando a los habitantes en la cancha mientras ellos están de espalda, mirando hacia el río.

Hasta el momento, si bien hay versiones encontradas, no se ha conocido el resultado final de las investigaciones, por lo que corresponderá a la Fiscalía determinar lo ocurrido realmente en esta zona del país.

En todo caso, lo dicho por Fajardo demuestra que, como ya lo ha dicho SEMANA, el exgobernador cambió el tono conciliador con el que venía en su campaña y ahora está a la ofensiva.