El encuentro entre el expresidente Álvaro Uribe y el padre Francisco de Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, fue una charla muy extensa sobre lo que se ha vivido en el conflicto armado en Colombia. La reunión se realizó este lunes en la casa de Uribe en Rionegro.
En la charla, el expresidente habló de uno de los capítulos más convulsos de la historia del país: los falsos positivos. El exmandatario reconoció que siendo presidente, cometió el error de señalar que las víctimas presentadas en ese momento como bajas en combate ‘no estarían recogiendo café’.
“Yo cometí un error por esos días al decir que ‘no estarían recogiendo café’. Yo he reconocido ese error en múltiples oportunidades, pero lo repito hoy ¿por qué lo cometí? porque fui inducido a error por informaciones que escuché”, aseveró Uribe, lamentando lo dicho.
En su charla con el padre De Roux aseguró que rechaza la tesis de que estos crímenes se cometieron porque en su gobierno había una exigencia de tener logros de seguridad. “La culpa nunca es de quien exige resultados”, dijo el expresidente. Agregó que “nunca se aplicó la doctrina Vietnam” y explicó que esta se usa es para explicar lo que hizo Estados Unidos en ese país, en donde hubo excesos de envenenamiento y otros vejámenes contra las comunidades
Cabe recordar que luego de la declaración de Juan Manuel Santos en la Comisión de la Verdad el pasado mes de junio, el expresidente Álvaro Uribe, en entrevista con Vicky Dávila en SEMANA, dio a conocer su postura frente a los falsos positivos, donde reiteró que “son dolorosos”.
“La política de seguridad democrática era una cosa, los falsos positivos nada tienen que ver con ello, porque dicen: ‘Es que Uribe exigía mucho’. A todo el mundo, a todo el mundo, entonces yo le exigía al ministro de obra, le preguntaba al director del Sena, ¿cuántos cupos van?; le preguntaba al ministro de Hacienda ¿Cómo va ese incentivo?; le preguntaba el ministro de Comercio ¿cómo va ese incentivo al turismo?, etcétera. Yo permanentemente -como hacia los consejos comunitarios los sábados y muchas veces los domingos, reuniones con la comunidad, a toda hora le hacía seguimiento”, expresó Uribe en esa oportunidad, quien dijo además que estas ejecuciones hicieron parte de “problemas de criminalidad”, donde no tuvieron que ver los altos comandantes, ni los ministros de Defensa.
“El cuento no es: como Uribe exigía mucho, esa exigencia, llevó refuerzos positivos, ¡No! Ahí hay problemas de criminalidad que nada tienen que ver con los altos comandantes, nada tuvieron que ver con los ministros de Defensa; problemas de criminalidad que nada tuvieron que ver con la seguridad democrática que bastante le sirvió al país”, indicó Uribe en SEMANA.