Un reporte entregado por la Gran Central de Abastos del Caribe (Granabastos) da cuenta que si bien algunos alimentos en Barranquilla tuvieron reducción en sus precios, la mayoría de los productos registraron un comportamiento alcista.
El comparativo de precios entre enero y octubre refleja que los descensos se presentaron en al menos 25 alimentos como el lulo, la naranja bumanguesa, uva nacional, el brocoli, la zaragoza, el tomate. Incluso, la papa, por ejemplo, pasó de costar $114.875 el bulto de 50 kilogramos a $77.167.
El pimentón rojo también tuvo una variación significativa entre enero y octubre, toda vez que su producción incrementó en los Santanderes y en el Valle del Cauca.
El cilantro, según las cifras reveladas por Granabatos, fue quizás el producto que presentó mayor reducción: a principios de este año, el mazo de ocho kilogramos costaba $61.708 y para octubre ese precio bajó a $4.183.
Sin embargo, la preocupación se concentra en más de 70 alimentos cuyos precios siguen registrando carestías. “Alzas representativas se presentaron en hortalizas como la berenjena valluna, tomate de cocina, mazorca, arracacha, productos que se están viendo afectados por la temporada de lluvias”, explicó Leonardo Mulford, gerente comercial de Granabastos.
El reporte también advierte que “otros productos, como el arroz blanco, azúcar, aceites de cocina, frutas importadas, productos de origen animal, continúan con los precios por las nubes, debido a los cambios constantes del dólar, bajas cosechas y el costo de insumos agrícolas”
Para Leonardo Mulford las condiciones en las que se encuentran algunos corredores viales en zonas productoras, como consecuencia de las precipitaciones, también tiene incidencia en las cotizaciones considerando las afectaciones en el transporte.
El bulto de arroz, que se cultiva en la región de la Mojana (Sucre, Bolívar y Córdoba), costaba en enero $123.417 y en octubre su precio cerró en $171.500, es decir, una variación del 39 %.
La remolacha se consolida como la hortaliza más cara, cuyo bulto pasó de $59.833 a $184.5563.
“En cuanto al abastecimiento, es decir, el ingreso de carga a la Central de Abastos, se presentó un comportamiento normal en la llegada de productos de las diferentes regiones del país. Se reporta la llegada de hortalizas y tubérculos del centro de Colombia (Cundinamarca y Boyacá), hortalizas y frutas del valle del Cauca; de Antioquia, tomate de árbol, maracuyá, banano y lulo; de la región Caribe yuca, ñame, plátano hartón y ahuyama”, anotó el gerente.
Mulford también explicó que el restablecimiento de los vínculos diplomáticos entre Colombia y Venezuela han tenido repercusión en el panorama económico de la canasta familiar.
“El restablecimiento de las relaciones ha hecho que varios productores, sobre todo en los departamentos fronterizos de Santander y Norte de Santander, hayan empezado a enviar alimentos cultivados en estas regiones hacia el vecino país. Esta situación, que aún es incipiente, ha generado que la producción se vea dividida entre el mercado local y el de Venezuela”.
En atención a lo anterior, Leonardo prevé que de seguir con esta tendencia y no compensar dichas cantidades exportadas con mayor producción para atender los dos mercados, podría generar desabastecimiento y aumento de precios. Sin embargo, considera que departamentos como Antioquia y Valle del Cauca tienen el potencial para incrementar la producción de varios cultivos, y por ende, solventar a demanda.