La salida del mundo criminal del clan Vega Daza en Barranquilla ha desatado una guerra sin precedentes entre bandas delincuenciales que quieren obtener a como dé lugar el poderío de las rentas ilegales como el narcotráfico, extorsiones y otros hechos que generan pánico en la capital del Atlántico.

SEMANA consultó a una fuente judicial que les sigue el rastro a estas estructuras criminales y que reveló cuáles son esas organizaciones que incluso han traficado armas largas hacia Barranquilla, pero que en su mayoría fueron incautadas.

“El trabajo no ha sido fácil, pero contamos con toda la tecnología y hemos logrado infiltrar a las bandas de los Pepes, los Costeños, los Papalópez y los Rastrojos Costeños, que son los que se quieren quedar con toda la renta criminal que dejó el sanguinario clan Vega Daza acá en la ciudad. Las interceptaciones a las líneas telefónicas que hemos plenamente identificado han logrado que demos duros golpes a estas organizaciones que están intentando traer armas largas para sus actividades criminales en Barranquilla y el área metropolitana. Hemos frenado e incluso hemos incautado esas armas largas, que en su mayoría son fusiles”, explicó un investigador.

Muchas armas están ingresando a la capital del Atlántico.

El tema del narcotráfico es una de las actividades que tienen en la mira tanto la Policía Metropolitana como la Fiscalía General de la Nación, pues el Atlántico, incluyendo Barranquilla, es utilizado como corredor por estas bandas, que en su mayoría tienen nexos con el Clan del Golfo e incluso no descartan que haya relación con carteles mexicanos.

“La droga y los arsenales de guerra que traen a la ciudad son los que lucran directamente a estas bandas, y en eso es que estamos enfocados en este momento. No hay que dejar de lado el tema de las extorsiones que están manejando reconocidos delincuentes desde la cárcel como alias Cachetes, entre otros, pero es un tema que judicialmente lleva el Gaula de la Policía”, expresó. Y es que hace unas semanas, en el norte de Barranquilla, las autoridades judiciales lograron la captura de siete sicarios que se hicieron pasar como turistas para realizar una operación criminal, pero la evitaron.

“Hemos logrado detener varios hechos criminales en Barranquilla y su área metropolitana con capturas de peligrosos integrantes de estas bandas que no hemos dejado reorganizar, afectando las principales actividades que les generan dinero. El ingreso de las armas largas lo están intentando hacer de una forma muy común, como por ejemplo en buses de servicio público que vienen de la frontera con Venezuela, pero también del suroccidente colombiano. Tenemos todo un componente trabajando en el tema”, detalló.

En Barranquilla, Cartagena, Santa Marta y Riohacha hay una atención especial con el violento enfrentamiento de las organizaciones criminales.

SEMANA conoció que estas bandas criminales han tenido un trabajo difícil en lo que respecta al puerto de Barranquilla, pues los controles han sido tan estrictos que ahora optan por interceptar las embarcaciones en altamar con lanchas rápidas que muchos casos salen desde el departamento del Atlántico.

El general Wharlinton Gualdrón, comandante de la Región 8 de la Policía Nacional, que tiene a su cargo seis departamentos del Caribe colombiano, aseguró que la tarea no ha sido fácil con los grupos armados ilegales.

“Tenemos presencia principalmente de los Pachencas y del Clan del Golfo en departamentos como Cesar, La Guajira y Magdalena, donde no hemos bajado la guardia con la inteligencia policial, que siempre ha dado golpes específicos en las 82 operaciones que han adelantado contra el crimen organizado en todo el Caribe”, precisó el oficial. De igual manera, señaló que han logrado la captura de 92 personas que están directamente vinculadas con el crimen organizado en toda la región.