Los hechos criminales en el suroriente de Barranquilla se encuentran desbordados pese a los controles que vienen adelantando desde la Policía Metropolitana. Pasadas las 12:00 del mediodía de este martes 12 de de noviembre, se registró una intensa balacera en el barrio Chiquinquirá, donde un hombre que es escolta de la cantante vallenata Natalia Curvelo terminó herido, mientras que un cerrajero de la zona fue alcanzado por varios impactos de bala y murió.
Tras el hecho criminal, un equipo de la Seccional de Investigación Judicial de la Policía Metropolitana de Barranquilla, se encuentra al frente del caso que generó gran pánico en esta zona de la capital del Atlántico.
Los investigadores judiciales se encuentran realizando la recopilación de testimonios así como también el análisis de los videos de las cámaras de seguridad para poder individualizar a los responsables de este caso que tiene a la comunidad con mucho temor.
El hombre asesinado fue identificado por las autoridades como Roque Antonio Camargo, pues recibió dos impactos de bala en el pecho. La persona herida es el escolta que responde al nombre de Deyris Eliécer Marín Pua, quien fue alcanzado por tres impactos de bala así: uno en el brazo derecho y dos en la espalda. Malherido este último fue llevado hasta el Hospital General de Barranquilla, donde se recupera de las lesiones.
Hasta ese centro asistencial llegaron los agentes de inteligencia de la Policía Metropolitana y se entrevistaron con el hombre herido para poder esclarecer los hechos.
Según la Policía Metropolitana, el escolta que terminó herido se encontraba arreglando una camioneta, cuando apareció caminando un hombre que vestía camisa negra, sacó un arma y comenzó a dispararle.
La víctima también tenía un arma de fuego y se desató una balacera que generó pánico en la zona por la cantidad de disparos que se escucharon. Los ciudadanos que se encontraban en las inmediaciones de la balacera corrían despavoridos de un lugar a otro porque no tenían certeza de qué era lo que estaba sucediendo.
Aunque muchas personas se colocaron a salvo de las balas, hubo un cerrajero que laboraba en la zona que no contó con la misma suerte y fue alcanzado por varios disparos. El hombre murió y no tenía nada que ver con lo que estaba ocurriendo en este populoso sector de la capital del Atlántico.
SEMANA conoció mediante fuentes judiciales que lo ocurrido se trató de un acto sicarial en contra del escolta, pero la Policía Metropolitana en medio de un comunicado señaló que todo tendría relación a un supuesto hecho de hurto.
Además, este medio de comunicación conoció el testimonio de una persona que se encontraba cerca de los hechos y aseguró que nadie sabe a ciencia cierta lo sucedido.
“Eso fue horrible porque yo me encontraba en uno de los talleres con mi taxi, cuando se escucharon los disparos y la verdad es que uno lo que hace es que se refugia porque como están las cosas lo pueden matar a uno. Lo que se dice es que fue un ataque criminal, hay que esperar que la Policía revise las cámaras de seguridad y miren a ver qué fue lo que sucedió”, dijo un hombre.