Un panfleto con los colores de la bandera de la capital del Atlántico y con figuras alusivas a la banda delincuencial Los Rastrojos Costeños, firmada por el frente de guerra Víctor Carlos Pérez de Alba, circula por el suroccidente de Barranquilla.
En el escrito, el grupo armado ilegal “ordena” un cese al fuego en varios departamentos de la región Caribe, según ellos, por la posesión del nuevo presidente Gustavo Petro.
“El frente Víctor Carlos Pérez de Alba informa que a partir de este momento los Rastrojos Costeños para toda acción militar contra el gobierno nacional y la población civil, donde se encuentra nuestra organización en los departamentos de Atlántico, Bolívar, Magdalena, Cesar, Santander y Valle del Cauca”, se lee en el panfleto.
Al parecer, el mensaje va directo al nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, pues aseguran que desde su posesión como presidente ellos terminan con las actividades delictivas en “pro de una negociación”.
“A partir de la posesión del presidente Gustavo Petro, cese de hostilidades militares por el compromiso de una Colombia en paz y una reconciliación nacional y en pro de una negociación con el gobierno”, dice el escrito.
Así mismo, señalaron que se unen al compromiso que ya hizo la guerrilla y el grupo armado Clan del Golfo sobre el cese de “operaciones militares”.
Lo más sorprendente del comunicado, para las autoridades y para los habitantes de la capital del Atlántico, es la intención que quedó explicita en el documento, pues ellos mismos aseguraron que este nuevo gobierno garantizará el cumplimiento “de sus derechos”.
“Sabemos que este gobierno si nos va a garantizar el cumplimiento de nuestros derechos, no como el gobierno saliente en búsqueda de dar resultados se dedicó a buscar a nuestros integrantes con el fin de asesinarlos sin garantizarles una captura con el debido proceso como lo establece la ley”, puntualizan.
Y al final, se dirigen expresamente al nuevo presidente de Colombia, con las siguientes palabras:
“Señor Gustavo Petro, a partir de este momento quedamos a disposición para sentarnos a firmar la paz total”.
Frente a esto, la Policía Metropolitana de Barranquilla dijo a SEMANA que el documento “es alusivo, pero no se puede decir con exactitud si es verás o no, porque no lo han confirmado”.
Sin embargo, el alcalde de la ciudad, Jaime Pumarejo, se pronunció frente al tema y fue contundente al decir que lo ocurrido en Barranquilla no tuvo que ver con movimientos políticos, sino con la criminalidad y el actuar despiadado de este grupo delincuencial.
“Los hechos que se le atribuyeron a la banda criminal Rastrojos-Costeños, no tuvieron motivación política, por el contrario, tuvieron una motivación oscura y atroz”, dijo el mandatario local.
‘Plan desarme’, la nueva estrategia en Barranquilla para frenar inseguridad
En medio de los anuncios que realizó este lunes 8 de agosto la Policía Metropolitana de Barranquilla sobre unas capturas de presuntos miembros de los Rastrojos Costeños, implicados y directamente responsables de los homicidios de conductores de servicio público en la ciudad y en los municipios de Soledad y Malambo, el alcalde Jaime Pumarejo reveló que trabajan en una nueva estrategia para contrarrestar la inseguridad.
Se trata de un proyecto para quitarle las armas a los delincuentes o a los ciudadanos que no tengan los papeles legales de las mismas, y de esta manera imputarles penas de hasta 9 años de prisión y evitar los homicidios descontrolados en la ciudad.
“Un proyecto que hemos elaborado durante los últimos meses y que dentro de pocos días vamos a lanzar, y se llama el Plan desarme, queremos quitarle las armas a los bandidos, queremos que todas las armas que sea portada o tenida por los barranquilleros conlleve una condena”, expresó Pumarejo.