“Se centraron en las cosas negativas”, dice Joaco Guillén. Diomedes: el ídolo, el misterio y la tragedia, el esperado documental de Netflix sobre la vida del Cacique de La Junta, Diomedes Díaz, uno de los exponentes más importantes de la música vallenata, se estrenó el pasado 30 de marzo y ha levantado una ola de críticas entre la fanaticada, la familia y los amigos del fallecido artista ante el descontento frente a gran parte de su contenido.
Este documental fue grabado en Tunja, Valledupar y Bogotá, y cuenta con entrevistas de sus allegados, familiares, productores y músicos, quienes han quedado sorprendidos con la intencionalidad expuesta en toda la información recopilada; entre ellos está Joaco Guillén, compadre y exmánager del artista, quien habló con SEMANA.
“Cuando el director me abordó de primerito, siempre pensé que contarían las cosas bonitas de mi compadre, los llevé también a que escucharan muchas historias con los que aquí toda la gente que lo quiere lo recuerda. No esperábamos que se centraran en un alto porcentaje en las cosas negativas, mi compadre hizo cosas muy grandes y llevó música y alegrías”, expresa.
Guillén, quien conocía al artista desde que tenía diez años de edad, cuando iban a la escuela juntos, reconoce que el cantante pasó por un fuerte episodio que marcó un antes y un después en su vida y exitosa carrera.
“Diomedes sufrió un hecho que partió su vida en dos como persona y artista. La pérdida de Doris Niño. Mi compadre sufrió daños fuertes en su vida personal, fue doloroso. Sin embargo, yo nunca le cerré las puertas, fui ese amigo [al] que no solo tuve mi finquita abierta para él, sino que ayudé para todo lo que necesitara, cuando en ese episodio muchos le dieron la espalda”, relata Guillén.
Este hombre relata en el documental que mantuvo oculto a Diomedes durante un tiempo en el que era buscado por las autoridades.
“Aquí su fanaticada rechaza que hable mal de su ídolo, aquí cuidan mucho y defienden la memoria de mi compadre. Tanto fue así que en el Valle hay fanáticos que no quieren ni ver al que hizo de Diomedes en la serie, y entendemos que no es su culpa”, dice.
A pesar del fuerte suceso, que condenó al artista que llenó estadios y plazas en todo el mundo con grandes éxitos como ´Mi primera cana´, ´Sin medir distancia´ y ´El cóndor herido´, su mánager lo recuerda todos los días con sus canciones y mejores historias.
“Algo que jamás olvidaré fue cuando me dijo que los amigos se conocían en las malas, que yo fui un amigo que siempre lo salvé. Tanto que siempre decía ‘Joaco, sálvame’ y días antes de fallecer había mandado a llamarme para que lo salvara, pero en ese entonces no me dieron el recado, sino de allí lo saco”, comenta entre risas.
A propósito de que se acerca el 26 de mayo, natalicio de Diomedes Díaz, desde ya Guillén le prepara un homenaje que partirá en caravana desde el Aeropuerto Alfonso López Pumarejo a las 9:00 a. m. y estará presidido por sus hijos, quienes interpretarán varias canciones en honor a su papá.
“Es una invitación abierta, queremos recordarlo a lo grande, después de dos largos años que por pandemia no pudimos hacerlo. Yo no quiero que mi compadre se olvide, me encargaré de mantenerlo vivo, a él y a Martín. Ya estos días le pedí permiso a Patricia, porque no quiero que Martín Elías quede en el olvido como veo que ha pasado aquí con grandes artistas”, explica.
El mánager le contó a SEMANA que, junto a gestores culturales, dolientes y grandes precursores del género, está expectante de los dos últimos capítulos, en espera de que hablen de su exitosa carrera, resaltando los buenos recuerdos.
Por estos días también es recordado por los cinco años de su partida, la promesa trunca del canto vallenato, el ‘Gran Martín Elías’, como lo llamaba su padre, quien un 14 de abril perdió la vida en un accidente de tránsito en la carretera de Tolú a San Onofre, que sigue siendo motivo de luto y tristeza.