En la mañana de este martes -13 de septiembre- funcionarios del INPEC notificaron que Digno José Palomino Rodríguez, considerado el delincuente más peligroso de Barranquilla y presunto cabecilla del grupo delincuencial Los Costeños, no estaba en su residencia donde cumplía detención domiciliaria, (Barrio Abajo, en Barranquilla).

De inmediato, se prendieron las alarmas. Las primeras versiones indicaban que el imputado se había fugado de la justicia y su paradero era desconocido. Incluso, así lo ratificó el INPEC.

Horas después comenzó a circular un video a través de las redes sociales donde el indiciado sorprendió dando sus declaraciones. Palomino habló y aseguró que no está prófugo.

“En el día de hoy, como siempre, la prensa amarillista, denuncia que me encuentro prófugo de la justicia. En estos momentos voy a desmentir, ¿por qué? en la tarde de ayer (lunes) fue (a su casa) el teniente de la estación de Policía de aquí de la aduana solicitando mi presencia. Pero yo estaba en una cita médica”, relató el imputado.

En ese sentido, Palomino indicó que luego de regresar del médico, por problemas de salud que lo han venido aquejando, nuevamente llegaron a su domicilio unos hombres que, según él, parecían extraños. “En la noche volvieron a ir, pero no me gustó la cuestión”, afirmó.

De hecho, anotó que el pasado sábado varias personas rondaban su casa y sintió su seguridad amenazada.

Así las cosas, a través del video, donde cubre su cara con un emoji, explicó que sus abogados adelantaron un documento donde piden el cambio de domicilio.

SEMANA consultó con fuentes del INPEC, quienes precisaron que no estaban notificados del cambio.

“Lo cierto es que él no se podía mover sin previa autorización y cuando se le hizo la visita no estaba. Para que un domiciliario cambie de domicilio debe pedir ese cambio al juez, una vez el juez apruebe el INPEC hace el traslado”. Aunque todavía quedan muchas dudas sobre lo sucedido, Digno Palomino dejó en claro que se encuentra en Barranquilla y que está a disposición de las autoridades.

Palomino, más conocido con el alias de El Viejo o Sebastián, fue trasladado el pasado fin de semana a su vivienda, ubicada en el sur de la ciudad. Luego de ser deportado desde Venezuela, tras la reanudación de las relaciones diplomática, la Fiscalía le abrió un proceso por su presunta implicación en homicidios. Por ejemplo, Palomino es indiciado de participar en el asesinato de un hombre, cuyo cuerpo apareció desmembrado en dos barrios de la ciudad .

El ente acusador le imputó los delitos de concierto para delinquir agravado, homicidio agravado, reclutamiento de menores de edad para la comisión de delitos, tráfico, fabricación y/o porte de estupefacientes y tráfico, fabricación y/o porte de armas de fuego, pero no los aceptó.

En su defensa, el señalado manifestó tener problemas de salud, razón por la cual un juez le otorgó el beneficio de casa por cárcel que debía cumplir en su residencia, ubicada en Barrio Abajo, centro de la ciudad.

SEMANA conoció un documento en donde evidentemente se ratifica que Palomino fue enviado a la vivienda sin el respectivo dispositivo de vigilancia (el brazalete) para monitorearlo. La orden la habría dado el mismo juez.

“En caso de que no se cuente en estos momentos con el dispositivo de vigilancia electrónica, el imputado deberá ser trasladado al lugar de su residencia y una vez se cuente con dicho mecanismo deberá colocárselo”, se resalta en el documento.