La Policía metropolitana de Barranquilla confirmó el hallazgo de un cuerpo sin vida en inmediaciones del corredor portuario de la ciudad. De acuerdo con las autoridades, uniformados de la Armada Nacional divisaron el cadáver flotando en el río Magdalena y fue remolcado a un costado del reconocido sector donde se ubica el monumento La Aleta del Tiburón.

Las primeras versiones indican que se trata de un hombre, aún sin identificar, tez trigueña, contextura delgada, de aproximadamente 40 años de edad, quien vestía una bermuda negra.

Según la información entregada por la Policía, el occiso, al parecer, habría fallecido por inmersión. Sin embargo, el cuerpo fue trasladado a la unidad de Medicina Legal para su respectiva intervención y posterior esclarecimiento de lo ocurrido.

Un caso similar se reportó el pasado 12 de octubre, cuando integrantes de la Sijín encontraron el cadáver de un hombre en la avenida del Río con calle 6, cerca La Aleta del Tiburón.

En aquel entonces, el hallazgo también registraba características parecidas al más reciente: persona trigueña, contextura delgada, bermuda gris, camisa negra y edad cercana a los 40 años.

Cabe reiterar que las entidades e instituciones judiciales han explicado que en la capital de Atlántico existe una presunta disputa entre organizaciones criminales por el control del territorio. Barranquilla, por ejemplo, supone ser una zona estratégica por su condición de sector portuario.

Otros cadáveres

En la mañana del viernes 14 de octubre, las autoridades confirmaron el hallazgo de dos cadáveres en distintos lugares del departamento de Atlántico.

El primer cuerpo fue encontrado en el municipio de Malambo, área metropolitana de Barranquilla, exactamente en el barrio La Luna. A las 6:30 a. m., residentes del sector y transeúntes alertaron sobre la presencia del occiso, quien yacía a la altura de un puente peatonal, ubicado en la vía oriental.

Según el reporte entregado por la Policía, la víctima fue identificada como Francisco Javier Jiménez y registraba heridas ocasionadas por un elemento cortopunzante.

Se pudo establecer que Jiménez presentaba anotaciones judiciales por los delitos de tráfico, fabricación y porte de estupefaciente y armas de fuego. También fue señalado de concierto para delinquir.

Dos horas después, a eso de las 8: 00 a. m., se reportó el hallazgo de otro cadáver en inmediaciones de las playas de caño dulce, área rural del corregimiento de playa Mendoza, jurisdicción del municipio de Tubará.

Los habitantes de ese sector, ubicado al occidente del departamento, advirtieron sobre el cuerpo sin vida de un hombre, contextura gruesa, de tez blanca, y quien estaba vestido con bermuda blanca, camiseta color azul y zapatos negros.

El comando de Policía departamental detalló que la víctima aún no ha sido identificada y se encontraba en estado de indefensión, es decir, el hombre tenía atado los pies y las manos. Sin embargo, las primeras versiones indican que no presentaba signos de violencia.

Ambos casos son materia de investigación y la inspección técnica de los cadáveres fue realizada por miembros del grupo criminalística