La Policía Metropolitana de Barranquilla le propinó un duro golpe a Los Costeños, la banda de sicarios y extorsionistas que atormenta a los habitantes del Atlántico. En 25 allanamientos, cayeron los siete hombres más cercanos al cabecilla y se intervino una empresa de vigilancia privada que, supuestamente, colaboraría con los ilegales.
Las unidades de investigación criminal e inteligencia rastrearon los movimientos de esta organización por doce meses, con el objetivo de sacar de circulación a los principales cabecillas de zona y capturar a las personas de confianza del jefe criminal, alias Castor, hoy recluido en la cárcel de máxima seguridad de El Barne.
“A través de entrevistas a fuentes, análisis de inteligencia, recursos tecnológicos, entre otros, se obtuvo el acervo probatorio para que la Fiscalía solicitara las órdenes de captura por los delitos de homicidio, concierto para delinquir, extorsión y tráfico ilegal de armas de fuego”, reportó la institución por medio de un comunicado de prensa.
Uno de los hallazgos más importantes es que una empresa de vigilancia privada con sede en Barranquilla, presuntamente, estaría vinculada a las actuaciones delincuenciales de Los Costeños, facilitando el uso de armamento, justificados en el porte legal, para la comisión de algunos delitos en las calles del departamento.
Los ‘pesos pesados’
En la redada fue ubicado alias Jerry, quien sería la mano derecha de Castor y su enlace directo. Él recibiría indicaciones para la comisión de homicidios selectivos, tráfico de estupefacientes, tráfico de armas y cobro de extorsiones. Este sujeto tendría una trayectoria criminal de siete años y estaría vinculado a la masacre de los Vega Daza.
“Es de anotar que este sujeto ya había sido capturado anteriormente por otro delito y gozaba detención domiciliaria desde el 18 de julio, sin embargo, se encontraba violando la media privativa de la libertad toda vez que fue sorprendido en otro lugar, evadiendo a la justicia”, detalló la Policía Metropolitana de Barranquilla.
Otro de los objetivos es alias María, quien actuaría como la jefa financiera del grupo criminal. Por ejemplo, era la encargada del manejo de las ganancias que obtenían por cuenta del narcotráfico y responsable del envío del dinero a los cabecillas de zona para el pago de nómina y la compra de estupefacientes.
Uno de los nombres de más importancia identificados durante este operativo es el del alias Calle, un dragoneante del Inpec que se habría separado de sus deberes para darle beneficios a miembros de Los Costeños que han sido privados de la libertad y que se encuentran en centros carcelarios en la ciudad de Barranquilla.
“Este resultado operativo no solo representa una afectación estructural y financiera a Los Costeños, sino que, sumado a las capturas de los cabecillas del Clan del Golfo, se espera que haya una disminución considerable en los índices delictivos en Barranquilla y su área metropolitana”, concluyó la Policía Nacional en un comunicado de prensa este lunes.