El alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, reveló a través de su cuenta de Twitter que ya hay pistas corroboradas por las autoridades sobre los nuevos ataques extorsivos registrados recientemente en la ciudad y que han cobrado dos víctimas, un hombre gravemente herido y uno que lamentablemente perdió la vida.

Las declaraciones del alcalde son delicadas, a tal punto que asegura que guardias del Inpec están involucrados en los hechos, por lo que incluso pidió que la entidad fuera liquidada.

“Autoridades identificaron a autores de extorsiones a estaciones de gasolina y a Siglo 21. Los operativos avanzan, Policía de Barranquilla informará. La orden vino desde 2 cárceles y delincuentes serán aislados. Grave que algunos guardianes de Inpec Colombia sean cómplices”(sic), dijo el alcalde Jaime Pumarejo en su trino a través de su cuenta oficial.

Para el mandatario es obvio que hay falencias en el trabajo que viene realizando el Inpec y no es primera vez que lo menciona; anteriormente, ya había pedido en tono de súplica que los dragoneantes fueran más conscientes a la hora de facilitarle un celular a un delincuente tras las rejas, asegurando que es como entregarle un arma.

“Si Inpec Colombia no puede vigilar a presos peligrosos o asegurar el correcto desempeño de sus propios funcionarios, sugiero liquiden la entidad hoy mismo... Las falencias advertidas en el sistema de justicia continúan y deben corregirse YA”, anotó.

Aseveró que es tarea del Estado y autoridades nacionales encargarse de ello, pues las afectaciones en Barranquilla producto de estos delitos no han parado.

“El Congreso debe debatir y legislar con urgencia para darles herramientas a la justicia, Fiscalía y Policía. Insisto: quien use un arma para cometer un delito debe ir preso sin beneficios” (sic), finalizó Pumarejo.

Estos son los celulares que usan los reclusos en la cárcel de Barranquilla para extorsionar. | Foto: Policía Metropolitana de Barranquilla

La grave situación de seguridad que atraviesan las estaciones de servicio en la capital del Atlántico por cuenta de las extorsiones ya dejan un bombero muerto, otro herido de gravedad y un cese de operaciones en cinco estaciones de servicios ubicadas en Barranquilla y Soledad que han sido víctimas de amenazas.

La víctima mortal de estos hechos fue un operario de la gasolinera Pumarejo ubicada en el barrio Juan Domínguez Romero, de Soledad, Atlántico, en el área metropolitana de Barranquilla, quien fue identificado como Tomás Segundo Molinares Malvido, de 50 años de edad, y fue atacado trabajaba en su turno en la estación de servicio.

Las gasolineras o bombas como las conocen en la Costa son el nuevo blanco de las extorsiones. | Foto: AFP or licensors

Según las autoridades, inicialmente se dijo que este caso se habría tratado de un sicariato que podría estar relacionado con extorsiones y ofrecieron una recompensa de hasta 10 millones de pesos para dar con los responsables, autores materiales como intelectuales.

“La Policía Metropolitana ha dispuesto de un grupo de investigación judicial, integrado hasta por funcionarios del CTI de la Fiscalía, con el objetivo de esclarecer estos lamentables hechos. De igual forma, damos a conocer a la ciudadanía que ofrecemos una recompensa de hasta 10 millones de pesos”, manifestó el coronel Giovanni Barrero, subcomandante de la Policía de Barranquilla.

El caso de Molinares Malvido ocurrió sobre la calle 18 con carrera 16 en el barrio Juan Domínguez Romero, cerca de las 8:00 p. m. del sábado 24 de junio, pero ya se había registrado un caso similar contra un hombre identificado como Emilio Solano Zuleta, quien también laboraba en una estación de gasolina ubicada en el sector del American Bar en el mismo municipio.

Hombres armados llegaron hasta la gasolinera y dispararon. | Foto: Nicholas Free

Hasta su lugar de trabajo también llegaron del mismo modo dos hombres en moto, que le dispararon en varias ocasiones y lograron herirlo de gravedad, pero no quitarle la vida.

El presidente de la Federación Nacional de Distribuidores de Combustibles y Energéticos (Fendipetroleo), Jairo Gómez, reveló en diálogo con Emisora Atlántico que el gremio contempla la posibilidad de irse a un paro por las actividades extorsivas de las que han sido víctimas.

“Estamos exigiéndoles tanto a las autoridades administrativas como militares y de Policía que nos garanticen la prestación de este servicio”, dijo Gómez.