En la tarde del pasado miércoles, 24 de mayo, se conoció la noticia de un grupo de cinco jóvenes capturaron a un pez gigantes mientras practicaban pesca submarina como hobby.

Se trata de un pez mero que pesó 297,8 kilogramos y midió 2,3 metros de altura. El espécimen fue encontrado en el sector conocido como Tres Piedras, en las playas de Santa Verónica, en el municipio de Juan de Acosta, departamento del Atlántico.

Pez Mero de 300 kilos atrapado en el Atlántico | Foto: Jospeh Molina

Joseph Molina, Alex Molina, Jesús Molina, Hernando Baldovino y Carlos Alvares, fueron los jóvenes que lograron esta hazaña. Joseph, en conversación con el medio local Zona Cero, dio a conocer cómo fue atraparlo y luego la odisea de traerlo a tierra.

“Ese día empezó a las 5:30 de la tarde del domingo, con una buena organización logística: equipos, combustible y meriendas. Al día siguiente, nos dirigimos primero a un punto que está a 18 kilómetros de nuestro punto de salida, pues el agua en las costas estaba turbia. Después de muchas inmersiones sin resultado decidimos descansar”, contó.

Pez Mero de 300 kilos atrapado en el Atlántico | Foto: Jospeh Molina

Sin embargo, al retomar la actividad dieron con, literalmente, el pez más gordo. Molina explicó que luego del arponeo bajó a 22 metros de profundidad, en ese momento su corazón latía a mil por hora, pues la cuerda que sostenía a esta bestialidad estaba tensa y costaba mantenerlo quieto.

Les tomó 30 minutos poder llegar hasta el mero y fue su hermano, Alex Molina, quien logró llegar hasta el pez, para llevarlo a la superficie. Inmediatamente, se encontraron con otro reto: subirlo a la lancha.

Pez Mero de 300 kilos atrapado en el Atlántico | Foto: Jospeh Molina

“Después fue otra odisea para subirlo a nuestra pequeña embarcación y sacarlo”, aseguró Joseph. Finalmente, con maniobras pusieron al pescado de casi 300 kilos en la embarcación y tomaron rumbo a tierra, donde la comunidad se impresionó al ver un animal de esa magnitud.

Como sacado de un libro del nobel del literatura, así fue la reacción de cada personas que escuchaba que las aguas de Santa Verónica habían sacado un pescado de dos metros. Pero en muchos casos la realidad supera la ficción y este grupo de jóvenes consiguieron algo particular de ver y creer.

Pez Mero de 300 kilos atrapado en el Atlántico | Foto: Jospeh Molina

Por otro lado, se conoció que los instrumentos utilizados para practicar esta actividad, son fabricados por ellos mismos, entre los que están fusiles, trajes, lastres, cuchillos, entre otros. Es por ello que Joseph destacó lo siguiente: “no somos destructores de la fauna, respetamos las tallas mínimas de captura”.

Asimismo, explicó que los recursos que obtienen con este tipo de pesca, son precisamente para solventar los gastos que requiere la misma y los peces atrapados, para el autoconsumo.

Pez Mero de 300 kilos atrapado en el Atlántico | Foto: Jospeh Molina

La siguiente es una imagen del pez mero, comparada con el tamaño de un hombre con estatura promedio en Colombia.

Pez Mero de 300 kilos atrapado en el Atlántico | Foto: Jospeh Molina

Encuentran tiburón ballena en el Pacífico

En plena faena, un grupo de pescadores provenientes del río Cajambre de Buenaventura, en el Pacífico colombiano, se toparon con un tiburón ballena, considerado el pez más grande del mundo. Esta especie quedó atrapada accidentalmente en una de sus redes durante unos momentos.

Los pescadores, asombrados por el tamaño del pez, que puede llegar a alcanzar los 12 metros de longitud, grabaron el épico momento y reportaron su aparición a la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC), la cual ha venido capacitándolos en materia ambiental.

Los pescadores liberaron al tiburón ballena. | Foto: CVC

“Nos informaron sobre la presencia del animal y se les dijo que se trataba de un tiburón ballena, que era un espectáculo tenerlo tan cerca, pero que por favor lo liberaran lo más rápido posible porque, al ser un pez, no respira como las ballenas, que lo hacen por las branquias”, explicó Edward Leonardo Sevilla, biólogo marino de la CVC.

Y añadió: “La verdad, nos alegra ver este tipo de acciones en los pescadores. Ha sido mucho tiempo de trabajo junto a ellos y continuamente nos demuestran que hay nuevas formas de proceder, en cuanto a la biodiversidad. Con ellos tenemos trabajos de educación ambiental que los han llevado a liberar todos los animales que caen de manera incidental en sus redes artesanas, principalmente, las tortugas marinas”.

El tiburón ballena puede llegar a medir hasta doce metros. | Foto: CVC