Se siguen conociendo más detalles de la masacre ocurrida en Puerto Colombia hace algunos días. El pasado jueves 29 de junio, tres miembros de una misma familia fueron asesinados en un sector exclusivo del municipio del Atlántico.
Información preliminar entregada por la Policía metropolitana da cuenta de que sicarios ingresaron hasta las instalaciones del conjunto residencial North Frontier, ubicado en Villa Campestre, y dispararon contra cuatro personas que departían dentro de una vivienda. Las personas asesinadas fueron Rafael Vega Cuello, Ronald Vega Daza y Ray Vega Daza (padre y dos hijos respectivamente).
Inicialmente, se especulaba que un sobrino de Vega Cuello sería la cuarta víctima mortal; sin embargo, según lo que se conoce, este familiar resultó herido y fue llevado a una clínica en Puerto Colombia. Asimismo, las autoridades informaron que los fallecidos fueron encontrados sin signos vitales en el lugar de los hechos.
“Los móviles son materia de investigación. Están todas las capacidades institucionales lideradas por la Fiscalía y policía judicial”, informó el comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, coronel Jorge Urquijo. Adicionalmente, se supo que no es la primera vez que esta familia es víctima de esta clase de atentados. Meses y años atrás, se han visto involucrados en hechos similares.
En octubre de 2022 y durante una fiesta celebrada en un club campestre, las autoridades registraron una balacera que dejó víctimas mortales. Igualmente, cinco años atrás, también ocurrió otro hecho con armas y la familia en medio.
La información de las autoridades reveló que los homicidas habrían llegado por encima del techo de la vivienda para, posteriormente, perpetrar la masacre. Además, siguen llevando a cabo las pesquisas correspondientes para dar con los responsables y los motivos de los homicidios.
Las autoridades revelaron que los homicidas realizaron una transacción bancaria importante para la investigación, aparte de tener a disposición las cámaras de seguridad de los alrededores para trazar todo el recorrido hecho por los delincuentes para el asesinato colectivo.
De forma preliminar, las autoridades indicaron que se rastreó un giro bancario que permitió dar con las identidades de los autores intelectuales. Días antes de perpetrar la masacre, se efectuó un pago de un dinero por el alquiler de un local que queda cerca al domicilio de los Vega.
La hipótesis manejada es que el asesinato se orquestó desde el local. Estando allí, los responsables se habrían hecho pasar como obreros de construcción y así esconder las armas en una bodega. Del mismo modo, habrían encontrado la manera de acceder desde ahí al tejado y llegar al lugar del crimen.
La poca información que se tiene hasta el momento señala que los homicidas ingresaron por un lugar contiguo al conjunto residencial North Frontier y llegaron hasta el techo de la vivienda escalando por las paredes. Al parecer, el asesinato habría sido planeado con trabajo de inteligencia.
“Hasta el momento, toda la información es preliminar, está en desarrollo; claro, todo esto es materia de investigación y es lo que estamos verificando. Efectivamente, tenemos ya información completa de que se usaron, para este hecho lamentable, armas largas y en este momento están en el proceso de custodia para verificar todas las actuaciones técnicas, balísticas y científicas”, dijo el coronel Urquijo. La institución detalló que los sicarios, aparentemente, se movilizaban en una camioneta Renault Duster color champaña.