Como Edwin David Meriño Barros fue identificado el niño de cinco años que murió en la tarde del domingo 20 de noviembre, luego de caer en una piscina destinada para adultos.
El caso se habría registrado en el centro recreacional Sede Paisa, ubicado en el municipio de Sabanalarga. Las autoridades explicaron que, de acuerdo con la información suministrada por testigos, “al parecer el niño resbaló cayendo a la piscina de adultos sin que alguien se percatara, lo que desencadenó en su deceso”, informó la Policía departamental.
“Al niño una vez auxiliado se le hizo maniobra de reanimación pero al parecer ya habría tragado demasiada agua”, agregó la institución. El menor fue trasladado a un centro clínico, pero desafortunadamente ingresó sin signos vitales.
Un caso similar se registró este fin de semana en el suroeste de Antioquia. Las autoridades investigan el fallecimiento de un menor de cuatro años que apareció flotando sin vida dentro de una piscina en el municipio de Hispania.
Al parecer, el niño se encontraba junto con otros 25 compañeros en medio de la despedida del curso de preescolar en el que estaba matriculado.
La víctima llegó al centro recreativo público con el objetivo de cerrar su paso por el grado transición. A la celebración fueron citados los docentes y los padres de familia de cada uno dado que era una actividad extracurricular.
En medio de la felicidad, de los estudiantes de la Institución Educativa Aura María Valencia, un par de gritos alertaron a la administración del balneario sobre una atípica emergencia. Uno de los adultos tenía en los brazos a un niño mientras trataban de reanimarlo, luego de haberlo recuperado de las aguas.
En el sector se trató de brindarle los primeros auxilios. Más tarde fue trasladado al servicio de urgencias del Hospital San Juan del Suroeste de Hispania donde los profesionales en salud confirmaron el fallecimiento, producto de un aparente ahogamiento. En Betulia se practicó la inspección judicial al cadáver.
Bebé ahogado en Bolívar
La Policía confirmó que un niño de tan solo cinco meses, identificado como Eli Javier Cantillo Ortega, murió en el corregimiento de San Miguel, Hatillo de Loba, sur de Bolívar.
De acuerdo con la información preliminar, el menor estaba en la cama y, al parecer, se cayó. La vivienda, supuestamente, se encontraba inundada como consecuencia de las fuertes lluvias y el niño se habría ahogado.
Las hipótesis dan cuenta que la madre estaba ocupada con algunas labores domésticas y cuando se acercó a la habitación, encontró la escena lamentable.
“Según lo manifestado por una tía del menor fallecido, el niño estaba dormido junto con la señora madre, quien lo dejó solo por unos minutos mientras prendía la estufa para cocinar. Al regresar, pasados 5 minutos, el menor no estaba en la cama. Al verificar los alrededores de la cama, observó al niño aboyando en el agua”, se lee en el reporte.
El menor fue trasladado al hospital La Candelaria, en el municipio El Banco, Magdalena, dónde los galenos confirmaron que ingresó sin signos vitales.
Semana conoció que la madre responde al nombre de Nancy Ortega Cortes y el padre se identifica como Lauterio Cantillo Arias.