Al menos 14 gremios de comerciantes del Atlántico sostendrán una reunión con el Gaula de la Policía Nacional para manifestar, nuevamente, sus preocupaciones ante la percepción de inseguridad que se registra en todo el departamento, especialmente en Barranquilla y su área metropolitana.
El encuentro se llevará a cabo en horas de la mañana de este viernes 3 de febrero. Los dirigentes acordaron asistir vestidos de blanco para enviar el mensaje a las autoridades que los atlanticenses “queremos vivir tranquilos, en paz, seguros”.
“No es posible que cada vez haya asesinatos, masacres, extorsiones en bloque con todas sus repercusiones, activan protocolos con presencia masiva de policías e inteligencia y al cabo de unas dos semanas bajan la guardia. Debe sostenerse cada acción de patrullaje, de inteligencia, del actuar de Fiscalía y jueces, y urge cupos carcelarios, como el gran revolcón al interior del Inpec, acabar con esa corruptela que se da desde las cárceles, desde donde siguen operando los cabecillas capturados”, expresó Dina Luz Pardo, presidenta del gremio de comerciantes del centro de la ciudad.
La dirigente explicó que si bien se destacan las capturas realizadas por la Policía, este tipo de procedimientos no resultan efectivos porque los delincuentes siguen operando desde las cárceles o, por lo contario, intensifican sus acciones de violencia como retaliación y en otros escenarios la legislación penal no llega a cumplir las exceptivas.
“Si no se corrige todo esto que está pasando al interior de las instituciones. Si no vemos un trabajo articulado con el sistema de justicia, si no se aumentan los cupos carcelarios, así como acabar la corrupción en el Inpec, un revolcón en el Inpec, vamos a seguir en las mismas”, sostuvo Pardo.
De igual manera, la procuradora general de la nación, Margarita Cabello Blanco, liderará este viernes en Barranquilla una reunión con autoridades del departamento y de la ciudad, para hacer un balance de la situación de orden público y definir medidas interinstitucionales en aras de garantizar la seguridad.
En la reunión, que se llevará a cabo a puerta cerrada, estarán presentes la gobernadora del departamento del Atlántico, el alcalde encargado de Barranquilla, el comandante de Policía del Atlántico, el comandante de la Policía Metropolitana, la directora regional del Inpec, entre otros.
El panorama de inseguridad
Expertos y autoridades coinciden en que el panorama criminal que registra en Barranquilla y su área metropolitana está configurado por la disputa entre estructuras delincuenciales que buscan apoderarse del territorio para satisfacer sus intereses en las rentas ilícitas.
Incluso, la Defensoría del Pueblo, en las alertas tempranas emitidas, da cuenta de que dichas organizaciones “se han concentrado de manera particular en las zonas costeras, sobre todo en el corredor de la Vía 40, Las Flores y el municipio de Puerto Colombia, por sus puertos clandestinos y su localización intermedia entre los puertos de Barranquilla y Cartagena”.
Janiel Melamed, director del Observatorio de Seguridad Ciudadana y profesor de la Universidad del Norte, considera que se hace necesario reorientar la política de seguridad en el distrito y revisar la manera en que se está abordando la complejidad del asunto, toda vez que la violencia ha ido escalando de magnitud y, evidentemente, ha sufrido procesos de transformación.
“La confrontación entre grupos criminales ha derivado, en los últimos años, en la consolidación de los altos índices de homicidios”, precisó Janiel.
De hecho, también hizo énfasis en las actividades extorsivas como uno de los factores desencadenantes y sobre los cuales se deben adoptar estrategias más efectivas.
“En Barranquilla no hay un estudio que permita la adecuada caracterización del fenómeno y su impacto sobre sectores comerciales. A falta de este esta caracterización, las capacidades e intenciones para intervenir en el flagelo pueden verse malgastadas”, indicó Melamed.
Por su parte, el alcalde de la ciudad, Jaime Pumarejo, explicó que “La búsqueda de rentas criminales por parte de las estructuras que se dedican a la exportación de sustancias ilícitas, que luego los lleva a vender los excedentes localmente a través del microtráfico, terminan siendo los dinamizadores de la extorsión, de los cobradiarios, hurtos y de otros fenómenos como alquiler de armas para cometer sicariatos”, explicó Pumarejo.