La noche de este jueves 28 de noviembre, las autoridades confirmaron el fallecimiento de una mujer que quedó atrapada entre los escombros tras el colapso de un edificio en Campo Alegre.
De acuerdo con los organismos de socorro, la mujer que perdió la vida fue identificada Nelly Insignares Cantillo, de 63 años. La zona está siendo evacuada mientras se realizan los actos urgentes.
La emergencia también dejó a cuatro menores de edad heridos tras quedar atrapados entre los escombros y posteriormente ser rescatados. La víctima mortal sería la abuela de estos niños.
Ante esta emergencia, SEMANA llegó al lugar de la tragedia donde conoció detalles del rescate de los niños que habían quedado atrapados entre los escombros. Kevin Rodríguez fue una de las personas que ayudó en esta labor mientras llegaban los socorristas.
“Mientras que unos estaban ayudando a sacar a la niña, que era la que más gritaba. Acá de este lado teníamos a dos niños que justamente uno estaba abajo y el otro estaba arriba. Decidimos sacar primero a la niña porque ella era la que estaba más comprometida con los escombros, la cabeza y todo eso. El niño simplemente le tapamos la cabeza y el niño decía que la ayudaran a ella. Por eso decía que él estaba bien. Y decidimos sacar primero a la niña. De este lado, gracias a Dios hicimos la labor, como dicen, sacamos a los dos niños”, mencionó el testigo.
Y agregó: “De aquel lado, gracias a Dios ya habían llegado (los socorristas) porque ya había que cortar las varillas y todo eso porque la niña siempre estaba comprometida”, dijo Rodríguez en este medio.
Actualmente, en el lugar del siniestro, se encuentran trabajando de manera coordinada diversas unidades de emergencia. El Cuerpo de Bomberos lidera las tareas de rescate, concentrándose en la búsqueda de posibles víctimas atrapadas bajo los escombros.
Además, los equipos de Cruz Roja y Defensa Civil están prestando atención médica urgente a los heridos, mientras garantizan la seguridad de los residentes en las áreas cercanas al desastre, controlando el acceso y evitando más accidentes.
Simultáneamente, la Oficina de Gestión del Riesgo del Distrito ha desplegado un equipo especializado para realizar una evaluación detallada de los daños estructurales en la zona afectada. Ingenieros y expertos en protección civil están trabajando en la inspección de la estabilidad de las edificaciones aledañas, así como de las infraestructuras viales cercanas, con el fin de identificar posibles riesgos adicionales.
Este análisis es vital para determinar la seguridad de las estructuras en la vecindad y prever otros posibles colapsos o fallas que pudieran poner en peligro a las personas que aún permanecen en el área.
La evaluación no solo busca identificar qué edificaciones podrían estar en riesgo, sino también establecer un plan de acción claro sobre la evacuación de otras personas que pudieran estar en peligro. Esta labor es fundamental para garantizar una respuesta adecuada y evitar más víctimas, priorizando la seguridad y bienestar de los habitantes de la zona.
Tras este incidente, SEMANA pudo confirmar que las autoridades han procedido con el desalojo de 17 familias. Esto ocurrió luego de que la administración municipal revelara que, desde hace casi 20 años, se había alertado sobre la vulnerabilidad de la infraestructura en la zona debido a serias fallas estructurales.
“La evacuación, por fallas en la estructura del conjunto Privilegios, inició en 2005 y el resto de las familias siguieron desocupando hasta el 2010 para dejar los 117 apartamentos del edificio completamente deshabitados. Pese a las advertencias de las autoridades, esta edificación fue habitada de manera informal”, detalló la Alcaldía de Barranquilla.