Cada vez que llueve en la ciudad de Santa Marta, una babilla de gran tamaño atemoriza a los residentes del sector aledaño al parque del Agua, ubicado en la Troncal del Caribe, diagonal a la rotonda de La Piragua. El animal volvió a hacer de las suyas este martes 2 de mayo, cuando al medio día decidió salir a dar un paseo.
Parece un cocodrilo, pero realmente es una babilla, un caimán de anteojos, conocido porque es una especie de reptil carnívoro que habita en cuerpos de agua dulce, pero según autoridades ambientales locales, el lago del parque no es precisamente un lugar óptimo para considerarlo su hábitat.
Además del riesgo que representa para el animal estar en el sitio, es también un peligro para los habitantes de la zona y para los animales. Desde lejos, vecinos del sector han grabado, temerosos, los videos que han sido compartidos en redes sociales, donde se ve al caimán pasear por los andenes peatonales.
Sorprendidos por el tamaño del reptil, los transeúntes se armaron de valor para lograr que el animal regresara al lago y, mientras este se sumergía, incluso algunos se tomaron la situación de manera jocosa cantándole una canción de despedida, pero realmente temen que vuelva a aparecer, paseándose con su tranquilo caminar por los ardedores.
Desde el Departamento Administrativo Distrital de Sostenibilidad Ambiental de Santa Marta indicaron que el animal no representa un peligro para la ciudad y que, por el contrario, es el caimán el que teme a los humanos y huye apenas se siente amenazado.
Ese pronunciamiento se distancia de lo manifestado por la Corporación Autónoma Regional del Magdalena (Corpamag), desde donde pidieron tomar cartas sobre el asunto antes de que pueda ocurrir un hecho que lamentar.
Las lluvias intensas provocan que estos animales salgan de su ecosistema y se refugien en otros sitios. En el departamento de Bolívar, un ciudadano, residente del municipio de María La Baja, alertó a las autoridades sobre la presencia de una babilla de aproximadamente dos metros de largo y 90 kilogramos de peso; su llamada logró evitar una tragedia en la zona.
El animal fue encontrado en la zona de El Puerto, en el municipio, y según los residentes del lugar, el reptil ya había atacado a caninos, aves de corral y peces de criaderos aledaños.
De acuerdo con la Policía, la llamada fue realizada luego de que uniformados estuvieran realizando labores de sensibilización a cerca de la fauna silvestre en el departamento.
Para sacar la babilla del sitio fue necesaria la presencia de varios uniformados del Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes y funcionarios del grupo de Bomberos, quienes tomaron las medidas de seguridad del caso para no afectar la salud del animal.
El reptil, cuyo nombre científico es ‘Caiman Crocodilus’, ya representaba un riesgo para la comunidad, especialmente para los niños y animales domésticos, puesto que naturalmente son animales hostiles y carnívoros.
Posterior al rescate, la babilla fue llevada ante una corporación ambiental donde verificaron su estado y luego la dejaron en libertad en su hábitat natural, alejada de todo contacto con seres humanos.
La especie rescatada se encuentra en vía de extinción debido a la caza indiscriminada y su ilegal comercialización por traficantes de fauna, algunas de las mayores amenazas a las que se enfrenta son la expansión de urbanizaciones, la infraestructura vial y el crecimiento de la población humana.
El coronel José Abdón Galindo Sánchez, comandante Departamento de Policía Bolívar, hizo énfasis en que afortunadamente el animal no atacó a ninguna persona; por esta razón, recomendó a los habitantes de estas poblaciones, fortalecer el cercado entre sus casas y mantener los patios libres de maleza, con el fin de evitar que animales peligrosos se oculten y en su instinto puedan atentar contra los humanos.