Este viernes 11 de noviembre se registró un fuerte vendaval en el municipio de Soledad, Atlántico, en el Área Metropolitana de Barranquilla que dejó más de 50 casas con afectaciones en los barrios Ciudad Paraíso y San Vicente.
En redes sociales se han difundido varios videos de como fueron sorprendidos los residentes de los sectores afectados por las ráfagas de viento que terminaron dejando casas destechadas, viviendas agrietadas, escombros y láminas por todos lados.
Las imágenes son impresionantes y en uno de las grabaciones se logra ver lo que sería una cuadra completa llena de restos de madera y partes de tejados que quedaron en el suelo.
“Dios mío Señor, sin láminas”, se escucha decir a una mujer cuando ingresa nuevamente a su casa.
En otro video corto grabado justo durante el momento de los hechos y cuando según las voces que se escuchan en el audio “el tornado cogía fuerza” se ve las láminas volar como hojas de papel en el cielo en forma de torbellino.
Las autoridades no han entregado un balance oficial de damnificados producto de esta nueva emergencia, el Cuerpo de Bomberos, sin embargo, hizo presencia en las zonas afectadas para socorrerlos.
Los estragos que sigue causando la ola invernal son incalculables en el departamento del Atlántico, solo en Barranquilla las autoridades hablan de alrededor de 2.000 damnificados censados, de los cuales 500 familias ya están recibiendo subsidio de subsistencia para su reubicación temporal.
“Estamos ya recogiendo los censos y terminando de enviarlos al Gobierno nacional para que esas reubicaciones, que sean necesarias de manera definitiva, sean planificadas con el Gobierno y nos ayuden a concertar esas decisiones a largo plazo, dependiendo de cada caso. Estamos depurando las bases de datos para asegurarnos que los beneficios lleguen a quienes tengan que llegar, pero al mismo tiempo entendiendo que esta es una emergencia humanitaria”, dijo el alcalde de la ciudad, Jaime Pumarejo.
El mandatario dijo que la idea es que, con el apoyo del Gobierno nacional, las familias afectadas sean involucradas en los programas de vivienda y que, de esa manera, se puedan ejecutar proyectos de reubicación que permitan que las personas que no son sujetos de crédito, lo sean con cuotas de bajo costo.
Reiteró que el panorama actual requiere de “un esfuerzo compartido, donde la ayuda llega a quien más lo necesite y, en este momento, lo que les estamos pidiendo a los barranquilleros es que nos acompañen. Hoy hemos querido cambiar el sentido de la entrega del parque Cristo Rey y, por eso, estamos liderando una feria de donaciones, que la gente se acerque y nos entregue alimentos no perecederos, colchonetas, frazadas y ropa en buen estado para llevar a esas comunidades. También se abrió una cuenta bancaria para recibir transferencias; lo que queremos es que la solidaridad se muestre en este momento donde tantas familias del Atlántico y Barranquilla lo necesitan”.
El mandatario concluyó que “hay que destacar que la buena preparación y el trabajo con las comunidades han permitido que el invierno más fuerte no sea el invierno con más damnificados. Hace 10 años, antes que empezáramos la canalización de aguas pluviales en el suroccidente de Barranquilla los damnificados fueron muchos más, las eventualidades fueron muchas más. Tenemos 2.000 damnificados, pero hemos evitado más pérdidas de vida y pérdidas materiales”.