Los deslizamientos de tierra que cayeron en la tarde de este 12 de noviembre siguen bloqueando la movilidad entre La Calera y Bogotá. Los organismos de socorro avanzan en la habilitación del corredor vial; sin embargo, la crítica estabilización del terreno retrasa las operaciones.
Desde hace 20 horas se mantienen tres puntos de bloqueo sobre este importante eje vial, en las inmediaciones del peaje de Los Patios. Los agentes de movilidad están frenando el paso de los automotores en la avenida circunvalar con calle 87, el kilómetro cinco en el sector San Luis la Capilla y el kilómetro seis vía Bogotá-La Calera.
La Gobernación de Cundinamarca les pidió paciencia a los conductores que se movilizan por los sectores afectados, pues la remoción de escombros tardaría más tiempo de lo esperado. Antes de mover un fragmento del material, se debe contar con el visto bueno de especialistas.
“Todos tienen la necesidad de ver la vía habilitada, se encuentra cerrada en este momento. Pero ha sido claro el instituto de riesgos: hay que evaluar, antes de cada movimiento de tierra, el estado de la montaña. Maquinaria hay en el sector, pero no puede trabajar de manera indiscriminada”, señaló.
Ante la presión de las actividades por borrar del mapa el material que se desprendió, los organismos de socorro que están atendiendo los incidentes corren el riesgo de, en medio de las labores de limpieza, generar más movimientos en masa que podrían dejar saldos negativos en el municipio.
Así las cosas, según explicó la seccional de tránsito y transporte de la Policía Nacional, las personas que tengan la necesidad de transportarse por el sector tienen como vía alterna la que conduce desde la capital del país hacia Sopó, ingresando a la localidad de La Calera por la parte alta.
El reporte parcial entregado por las autoridades departamentales da cuenta de que seis viviendas resultaron afectadas por las fuertes precipitaciones de este sábado y tres vehículos están damnificados por las emergencias. De momento, se avanza en el censo de los estragos ocurridos.
En la tarde del sábado se confirmó la primera muerte. La Gobernación de Cundinamarca confirmó el hallazgo de otros dos cuerpos sin vida que fueron reportados como desaparecidos en medio de las fuertes precipitaciones que se registraron en la tarde de este sábado en La Calera. Las dos víctimas se movilizaban junto a otra persona, la única que sobrevivió, en un vehículo.
La emergencia comenzó después de las 4:00 p. m. cuando los tres vigilantes de un conjunto residencial de la zona rural de este municipio recibieron una orden a través del radio. En la comunicación les indicaron que debían recorrer el eje vial del sector para verificar los estragos que dejó el aguacero.
Ellos se montaron en un carro particular y empezaron a hacer el recorrido. Sin embargo, mientras el conductor maniobraba el volante para esquivar las afectaciones del agua, una montaña se desprendió sobre el automotor. Solo una persona corrió con la suerte de abrir la puerta y salir corriendo.
Al parecer, el represamiento de la quebrada San Antonio desestabilizó el terreno y arrastró por varios metros el vehículo con las otras dos víctimas a bordo. El presidente de la junta de acción comunal de la vereda fue quien alertó a los organismos de socorro sobre la lamentable emergencia.
En el informe emitido por el consejo municipal de gestión del riesgo de desastres se advirtió que el movimiento en masa se registró al margen de la línea que divide a La Calera con Bogotá. En consecuencia, las labores de búsqueda se descargaron sobre los dos territorios.
En la mañana de este domingo se confirmó el hallazgo: “El grupo de rescate de Bomberos Bogotá informa que se encontraron los cuerpos de los dos hombres desaparecidos ayer, a causa de un deslizamiento de tierra en la vía Bogotá – La Calera”, afirmó el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García.