El municipio de Girardot, Cundinamarca, ha sido noticia desde la mañana de este 8 de junio, debido a un caso de abuso sexual que tiene impactados a sus habitantes. La víctima, un niño de tan solo cinco años, y la presunta victimaria, su mamá.
La Policía informó que un menor de cinco años estaba siendo abusado presuntamente por su mamá. Quien hizo la denuncia fue, ni más ni menos, que el hermano mayor, mediante un video que presentó ante las autoridades.
El coronel Edwin Urrego, comandante de Policía de Cundinamarca, informó: “Se logró determinar a través de una denuncia efectuada por un adolescente, quien daba a conocer que su progenitora abusaba sexualmente de su hermano menor de cinco años, hechos registrados a través de un video que se volvió clave para que se realizara la orden judicial”.
Al parecer, el joven que denunció encontró en el computador uno de varios videos que ella grababa abusando de su hijo menor para comercializarlos y, de inmediato, acudió a informar a las autoridades.
Otro caso de abuso sexual se registró en Nimaima, municipio ubicado al noroccidente de Bogotá, de acuerdo con el comandante de la Policía de Cundinamarca. Gracias a las investigaciones, se capturó al presunto victimario.
“En el municipio de Nimaima, donde se logró identificar a una persona que ofrecía servicios turísticos y sexuales con menores de edad. En desarrollo de esta investigación, se lograron detectar cinco adolescentes que eran explotados sexualmente, a quienes se les restablecieron sus derechos”, informó.
En Barranquilla casi linchan a profesor por presunto abuso
Una situación grave de orden público se registró un par de días atrás en el sur de Barranquilla. Resulta que un padre de familia denunció que su hija de cuatro años habría sido víctima de abuso sexual por parte de un docente, que labora en un Centro de Desarrollo Infantil (CDI), ubicado en el barrio Carlos Meisel.
Según la denuncia interpuesta, la niña comenzó a sentir dolor en sus partes íntimas y al someterla a exámenes médicos encontraron anomalías. “Le vieron sus partes y se dieron cuenta de que la niña había sido penetrada”, dijo el padre de la víctima, Edwar Bautista.
La menor les habría contado a sus progenitores que uno de los docentes le practicaba tocamientos y en una cita con la psicóloga identificó al supuesto agresor.
“Mi hija identificó que era él quien la estaba tocando. Ella decía que era el profe Carlos y que en el momento que descansaba, en el CDI, despertó porque decía que le estaban tocando sus partecitas. Ella vio al profesor, que le dijo que le estaba matando unos zancudos. La niñita se lo dijo a la maestra, quien regañó al profesor, que dejara a la niña tranquila”, relató Bautista.
Debido a lo anterior, la comunidad intentó tomar justicia por su propia mano. Un grupo de al menos 500 ciudadanos se dieron cita en la institución educativa y atacaron las instalaciones del CDI en busca del presunto abusador.
“Siendo las 11:00 de la mañana del lunes 5 de junio, en la carrera 25 con calle 74, barrio Carlos Meisel, la Patrulla del cuadrante fue informada de un motivo de policía que se presentaba a las afueras de un centro educativo, donde la comunidad pretendía agredir a un docente de dicha institución”, señaló la Policía metropolitana de Barranquilla.
Los padres de familia lanzaban piedras contra el centro educativo y agredieron a un profesor de 60 años, quien, aparentemente, era la persona que habría practicado tocamientos a la menor
“De inmediato se llegó al lugar y se logró proteger la vida de un particular de sexo masculino, mayor de edad, quien fue víctima de golpes en diferentes partes del rostro y el cuerpo, a quien señalaban de, presuntamente, realizar actos sexuales con una menor”, agregó la institución.