Tras la gran cantidad de reacciones que se generaron en la capital del país por la declaración que entregó el propio alcalde Carlos Fernando Galán, este fin de semana, en la que advirtió que Bogotá podría entrar en alerta roja por la situación en los embalses, el mandatario distrital salió este lunes 16 de diciembre a entregar un parte de tranquilidad.
En una publicación en su cuenta de X, el burgomaestre aseguró que “los embalses de Bogotá no están en niveles críticos, ni estamos cerca de la alerta roja”.
El alcalde Galán puntualizó: “Si no cayera una gota de agua en Chingaza (un escenario altamente improbable), aún tendríamos agua para más de siete meses”.
En todo caso, durante el fin de semana, en una entrevista con Red+, el alcalde fue el encargado de hablar de una posible llegada de alerta roja en la ciudad por el nivel de los embalses.
“Asumiendo que no entrara ni una gota de agua a Chingaza, tendríamos 178 días para declarar alerta roja, es decir, seis meses. Aun así, en la alerta roja, tendríamos dos meses más de agua”, fueron sus palabras.
Eso sí, el mandatario puntualizó que, aun en la fase de alerta roja, la ciudad seguiría contando con dos meses adicionales de agua, lo que daría tiempo para implementar medidas más estrictas.
Planes de contingencia
A pesar del llamado a la tranquilidad del alcalde Galán, este lunes, en su reporte diario, la CAR Cundinamarca reveló que el nivel del Sistema Chingaza bajó del 50 % y el director de la entidad, Alfred Ballesteros, indicó que se ha venido presentando una importante reducción en las precipitaciones de diciembre.
Con corte a este lunes, el nivel de Chuza está en 39,77 %, el embalse de San Rafael está en 82,70 % y en total, el nivel del Sistema Chingaza está en 49,86 %.
Ante esta situación, el director Ballesteros pidió establecer planes de contingencia para enfrentar la temporada seca de enero y febrero.
“Hacemos un llamado al ahorro y cuidado del recurso hídrico, pues los pronósticos nos indican que para los meses de enero y febrero de 2025 se mantendrán las condiciones propias de la temporada seca”, afirmó Ballesteros.
A renglón seguido, el funcionario subrayó: “Tenemos Chingaza sobre un 50 % y el Agregado Norte, aproximadamente en un 56 %, por lo que se hace necesario que las empresas prestadoras de servicios públicos implementen planes de contingencia y medidas de ahorro y uso eficiente del recurso hídrico para que no tengamos problemas de desabastecimiento en los primeros meses del año”.
Es de mencionar que una entrevista con SEMANA, el personero de Bogotá, Andrés Castro, cuestionó que se haya levantado el racionamiento de agua en Bogotá para la última semana de diciembre y la primera semana de enero, advirtiendo que hay que tomar decisiones con mucha prudencia.
“Frente al tema del agua en Bogotá, yo he resaltado dos [asuntos] puntuales: mucha prudencia en la toma de decisiones porque hoy el agua es un tema crítico de ciudad, y a la ciudadanía mucha responsabilidad en el uso del agua, porque si no tenemos responsabilidad en el uso, y prudencia, de acuerdo con las proyecciones que ha hecho el equipo que me acompaña en esto, para finales de marzo podemos estar en Chuza sobre el 18 y el 20 %, lo cual es bien preocupante”, dijo Castro.
Así mismo, el jefe del Ministerio Público Distrital enfatizó: “Lo que más preocupa, y por eso hemos hecho las alertas, es que se tengan que incrementar las medidas que hasta ahora se han tomado. Entonces, el mensaje es prudencia para quienes están tomando las medidas porque los niveles históricos así nos lo piden”.
Y concluyó: “Aquí el tema es cómo le hacemos seguimiento, cómo tomamos conciencia de que los embalses no están en los niveles mínimos para poder eliminar este tipo de medidas, pues son medidas que se tienen que tomar, pero a cualquier medida que se tome en este momento el llamado es a que se evalúe dentro del margen de la prudencia, porque los niveles, a pesar de que han subido un poco, no están en un ideal para levantar las medidas”.