En horas de la noche de este martes, 8 de noviembre, se presentaron serios inconvenientes en el Transporte Masivo de Bogotá, TransMilenio, específicamente en la ruta con destino al Portal Suba.

Asimismo, la estación 21 Ángeles fue la más afectada, a tal punto que las personas tomaron la decisión de bajarse de los articulados, con el propósito de caminar con destino a su hogar. No obstante, SEMANA conoció que a esta horas el transporte ya funciona con normalidad.

Ahora bien, las razones que llevaron a este caos en esa parte específica de la ciudad fueron por varios motivos, especialmente, las manifestaciones que se llevaron a cabo en horas de la tarde por parte de feministas, debido a los recientes casos de abuso sexual denunciados en los últimos días al interior de buses que conforman el transporte público de Bogotá.

De igual manera, otra de las razones que llevó al colapso del sistema fue los bloqueos generados en la NQS, la calle 80 y demás sectores que albergaron las manifestaciones, los cuales llevaron a que ese corredor y el Portal Suba se vieran seriamente afectados.

Además, SEMANA conoció que otra de las razones que llevó al caos vehicular se debió por temas de clima y el número de personas en las calles retrasó el ingreso de los buses al portal. Asimismo, al llegar tantos articulados al portal por el retraso de las rutas, esto generó que no hubiera espacio para seguir estacionándolos.

Cabe mencionar que el plantón inició hacia las 3:15 de la tarde en la calle 79 con carrera 11, en el norte de la ciudad, a la altura de la Universidad EAN. Asimismo, las manifestantes realizaron bloqueo de la intersección durante varios minutos y posteriormente iniciaron su recorrido por la toda la carrera 11 con destino a la Universidad Pedagógica en la calle 72.

Las feministas siguieron con las manifestaciones y se dirigieron al antiguo monumento a Los Héroes. Por esta razón, y hacia las 4:45 de la tarde, TransMilenio informó que se dejó de atender las estaciones de Héroes, Virrey y Calle 85.

Esta protesta se da no solo por el sonado caso de abuso sexual de Hilary Castro, la pasada noche del lunes 31 de octubre, en medio de la celebración de Halloween en la estación de TransMilenio La Castellana, sino también por otro caso de abuso sexual del que fue víctima una joven de 18 años en un bus del SITP cuando se dirigía a clases en la Universidad EAN.

En relación con estos casos de abuso sexual, la Veeduría Distrital reveló un desgarrador informe que da cuenta que ocho de cada diez mujeres han experimentado acoso sexual callejero en Bogotá.

La Veeduría Distrital realizó un informe con el propósito de estudiar la violencia de género que tiene lugar en el transporte y el espacio público, y que se manifiesta a través de múltiples conductas verbales y físicas que configuran el acoso sexual callejero, y que va desde silbidos, persecuciones, hasta tocamientos u otras agresiones.

De las ciudadanas encuestadas, siete de cada diez mujeres manifestaron tener miedo a sufrir un ataque sexual en el transporte o en el espacio público, y ocho de cada diez mujeres han experimentado una situación de acoso sexual en algún momento de su vida.

La encuesta también detalla las formas de acoso de las que han sido víctimas y se evidencia una multiplicidad de manifestaciones que, a pesar de detentar distintos grados de gravedad, son configurativas de acoso callejero, vulnerando los derechos humanos y la libertad ciudadana de las niñas y mujeres.

Finalmente, la protesta de hoy es la segunda manifestación que realizan las mujeres feministas en Bogotá en menos de una semana. El pasado jueves tres de noviembre todo terminó en vandalismo.