Los delincuentes cuentan con la nueva tecnología de tarjetas e-sim (sim virtual), dentro de las cárceles para extorsionar y amenazar a comerciantes, ciudadanos y líderes sociales en Bogotá y el resto del país.
Según el concejal de Bogotá, David Saavedra, este nuevo sistema dificulta el rastreo y facilita la conectividad para realizar movimientos en el sistema financiero de los dineros que obtienen por medio de la extorsión. Además, un celular puede tener 8 e-sim que van rotando en el mismo equipo y esto hace más difícil la detección, por parte de las autoridades, para contrarrestar este delito.
Además, “no es posible que de los 22 bloqueadores de señal instalados en las cárceles del país, solo funcionen 2 de ellos, lo que facilita aún más el accionar criminal desde los centros de reclusión que se han convertido en oficinas de la extorsión en Colombia, la falta de acción por parte del gobierno nacional y el mal funcionamiento de las plataformas tecnológicas encargadas del bloqueo de la señal de celulares están favoreciendo a la criminalidad” agregó.
Según la Procuraduría de la Nación, para enero del 2024, el 41 % de los delitos de extorsión ocurren desde las cárceles. Por ello, el ministerio público propuso evaluar la creación de una unidad judicial exclusiva especializada e interinstitucional para desarticular la extorsión carcelaria a nivel nacional.
El más reciente informe de la Fundación Paz y Reconciliación (PARES) asegura que la mayoría de los casos de extorsión desde las cárceles cuentan con características comunes. Una de ellas es que las intimidaciones son generadas por los cabecillas de las bandas que han sido recluidos, pero siguen delinquiendo desde la cárcel. En segundo lugar, los delincuentes cuentan con un grupo estructurado de personas que hacen todo el trabajo criminal en las calles, detectando a posibles víctimas, observando cómo están sus negocios y analizando cada movimiento.
De los diezprincipales grupos de delincuencia organizada que operan en Bogotá y otras ciudades, al menos nueve cuentan con uno de sus cabecillas encarcelados. Las extorsiones se realizan principalmente desde llamadas telefónicas o mensajes de WhatsApp, o en otros casos, a través de panfletos.
En Bogotá para el primer semestre del 2023 se presentaron 627 denuncias por casos de extorsión, sin embargo, para el periodo de enero a junio del presente año, se han registrado 1228 denuncias de extorsión en la capital. Por ello, se puede observar que hubo un aumento casi del 100 % en el primer semestre de 2024, frente al mismo periodo de 2023. Cundinamarca es el segundo departamento del país con la mayor taza de denuncias por extorsiones; solamente lo supera Antioquia.
Las localidades con mayor índice de extorsión y presencia de grupos criminales son: Usaquén, Suba, Santa Fe, Los Mártires, Kennedy, Bosa, Ciudad Bolívar, Rafael Uribe, San Cristóbal y Usme.