La inseguridad en la capital colombiana sigue haciendo de las suyas, pues la ola de violencia en algunos sectores de Bogotá no da tregua. De hecho, más de 300 homicidios en los primeros cuatro meses de este año en Bogotá, lo cual tiene en alerta a las autoridades y, por su parte, la Fiscalía General de la Nación hace una advertencia en materia de seguridad para la capital.

El último hecho de violencia que se registró en la capital fue este jueves 27 de abril, sobre 03:43 de la madrugada. De acuerdo con las autoridades, el CAI Gaitana recibió el reporte de un hombre que se encontraba herido a la altura de la calle 135a con carrera 151, en el barrio San Pedro, en la localidad de Suba. Por su parte, las autoridades al llegar al lugar de los hechos identificaron a Manuel Alejandro Ospina Cupitra, un hombre de 29 años sin signos vitales con lago hemático.

La Policía Metropolitana de Bogotá confirmó que fueron dos hombres que, con un arma corto punzante, “afectaron su integridad”, por lo que perdió su vida ante la gravedad de sus heridas.

Hasta el momento se desconoce el paradero de los responsables del asesinato, pero las autoridades, ha desplegado un operativo en la zona del barrio San Pedro para dar pronto con los responsables de este violento caso.

De acuerdo con las autoridades, fueron dos hombres que con un arma corto punzante le quitaron la vida a este hombre de 29 años. | Foto: Getty Images

Cayeron cuatro integrantes de Los Maras, red criminal dedicada a cometer hurtos violentos en Bogotá

La banda delincuencial conocida como Los Maras se había vuelto el terror de los habitantes del barrio La Perseverancia, de la localidad de Santa Fe, en el centro de Bogotá.

De acuerdo con la investigación adelantada por la Fiscalía General de la Nación, los miembros de la banda atemorizaban a la comunidad con armas cortopunzantes y de fuego para hurtarles sus pertenencias. Luego de meses de trabajo conjunto y seguimiento de las autoridades, lograron capturar a cuatro señalados miembros de la banda criminal.

La Fiscalía General judicializó a Kevin Camilo Gaitán Tijaro, Ismael Alfonso Cuéllar Arias, Nicolás Rincón Herrera y Juan Manuel Gamboa Avella. Los procesados fueron capturados con orden judicial y presentados ante un juez de garantías, quien les impuso medida de aseguramiento en centro carcelario.

Por estos hechos, el ente acusador imputó a los cuatro sindicados como presuntos responsables de los delitos de hurto calificado y concierto para delinquir. Pese a las pruebas, ninguno aceptó los cargos.

Los Residentes usaban a un menor de edad para robar casas y oficinas en el norte de Bogotá - Foto: Fiscalía General | Foto: Fiscalía General

De acuerdo con las autoridades, esta organización podría estar presente en otras localidades del sur de la capital del país. En los próximos días, según se conoció, se podrían dar otros operativos contra el delito y contra esta y otras bandas que estarían atemorizando a la comunidad, especialmente en las localidades de Kennedy, Engativá y El Tunal.

De igual forma, la Fiscalía General hizo un llamado a los comerciantes que han sido víctimas de extorsiones para que denuncien los hechos, ya que las denuncias han conducido a varios operativos que han permitido la captura de miembros de El Tren de Aragua y otras estructuras dedicadas a este delito.

Usaban a un menor de edad para robar casas

La Fiscalía General de la Nación, a través de la Seccional de Bogotá, judicializó a miembros de la organización delincuencial conocida como Los Residentes, señalada de usar a un menor de edad para ingresar violentamente a viviendas y oficinas del norte de la ciudad, con el propósito de robar elementos de valor.

Los procesados, que usaban armas de fuego para robar, fueron capturados con orden judicial y presentados ante un juez de garantías (Imagen de referencia) - Foto: Getty Images/iStockphoto | Foto: Getty Images

Los integrantes de esta organización, al parecer, llevaban a un menor a zonas comerciales o residenciales de las localidades de Suba, Usaquén y Teusaquillo y las recorrían para no despertar sospechas, mientras identificaban un factor de oportunidad para realizar su actividad ilegal.