El tema de la inseguridad viene siendo desde hace varios años una de las principales problemáticas en Bogotá. Las noticias sobre atracos —tanto en la noche como a plena luz del día— se han vuelto frecuentes, y los ciudadanos sienten temor a la hora de salir a la calle.
Los delincuentes intimidan a sus víctimas con armas cortopunzantes o armas de fuego. Precisamente, en el marco de las actividades para frenar la inseguridad en la ciudad, las autoridades locales han incautado una impresionante cantidad de elementos de esta naturaleza durante lo corrido del año.
El concejal Samir Abisambra compartió un informe donde se detalla que, durante enero y mayo de este año, se incautaron 69.904 armas cortopunzantes y 417 armas de fuego en Bogotá.
“Aunque la incautación de armas de fuego es menor a la de armas cortopunzantes, llama la atención que el número de armas cortopunzantes incautadas ha aumentado este año si se compara con el mismo periodo del año anterior”, anota el informe.
En el documento, el cabildante del Partido Liberal recoge que enero, febrero y marzo fueron los meses en donde se reportó un mayor número de armas cortopunzantes incautadas durante el año 2023. Adicionalmente, señala que TransMilenio se ha convertido en el espacio donde se han realizado el mayor número de estas incautaciones: ya van más de 2.525 armas cortopunzantes incautadas en el sistema durante lo corrido del año.
Las cifras reseñadas en el informe fueron dadas a conocer por la Policía Metropolitana de Bogotá. Las localidades en donde se han presentado mayor número de incautaciones de armas cortopunzantes son:
- Ciudad Bolívar (1.715)
- Kennedy (1.365)
- Rafael Uribe Uribe (1.134)
“Frente a esta problemática, según la Policía Metropolitana de Bogotá, se han tomado medidas correctivas y preventivas, y se han realizado algunas acciones que permiten proteger la vida, integridad, libertad y patrimonio económico de los ciudadanos en Bogotá, como lo son acciones operacionales y acciones judiciales”, menciona el informe difundido por el concejal Abisambra.
Cárcel para responsable de lanzar ‘papa bomba’ a policía en medio de disturbios en la U. Nacional; el patrullero sigue en estado crítico
En un hecho significativo en el caso del ataque con una ‘papa bomba’ que dejó gravemente herido al patrullero John Freddy Rodríguez, durante un enfrentamiento en la Universidad Nacional de Bogotá el pasado 8 de junio, una juez de control de garantías impuso medida de aseguramiento en establecimiento carcelario a Diego Fernando Perilla Carvajal, señalado como responsable del hecho.
Las pruebas recolectadas por la Fiscalía General, que incluyen videos de cámaras de seguridad, señalan a Perilla Carvajal como la persona que lanzó el artefacto explosivo desde el campus universitario con la intención de causar daño a los uniformados, tal como ocurrió en el incidente. Actualmente, el patrullero Rodríguez se encuentra en estado crítico en el Hospital de la Policía Nacional.
La captura de Perilla Carvajal fue llevada a cabo por la Sijín de la Policía Metropolitana de Bogotá en una vivienda de la localidad de Kennedy, ubicada en el suroccidente de Bogotá.
La captura de Perilla Carvajal fue llevada a cabo por la Sijín de la Policía Metropolitana de Bogotá en una vivienda de la localidad de Kennedy, ubicada en el suroccidente de Bogotá. Durante el operativo, también fue detenida otra persona identificada como Anderson Sánchez Hera, presuntamente uno de los principales integrantes de un movimiento radical que se sospecha promueve confrontaciones con las fuerzas de seguridad y actos violentos con el objetivo de sabotear las protestas.
Un fiscal de la Seccional Bogotá impuso a los detenidos, teniendo en cuenta su posible responsabilidad y roles desempeñados, los delitos de homicidio en grado de tentativa agravado, fabricación y tráfico de sustancias u objetos peligrosos, utilización ilegal de uniformes e insignias, fabricación, tráfico y porte de armas y explosivos de uso restringido o privativo de las Fuerzas Armadas, así como ocultamiento, alteración o destrucción de elementos materiales probatorios.
Con esta medida de aseguramiento se espera que se lleve a cabo un proceso judicial riguroso para determinar la responsabilidad de los implicados en este grave acto de violencia contra un miembro de la fuerza pública.