A las oficinas de SEMANA llegó un impactante video de una paciente con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), que desafortunadamente muere ahogada mientras es atendida por una enfermera.
La esclerosis lateral amiotrófica es una enfermedad que ataca a “las neuronas en el cerebro, el tronco cerebral y la médula espinal que controlan el movimiento de los músculos voluntarios”, de acuerdo con MedlinePlus, Biblioteca de Medicina de Estados Unidos.
En las imágenes se ve cómo la enfermera de la empresa Medicina y Terapias Domiciliarias (MTD) no reacciona a tiempo ni procede con profesionalismo. Mientras la mujer, llamada Heidy Carolina Saldaña, se está ahogando, la profesional de salud agarra su mano sin mayor reacción, luego levanta su cabeza mientras el cuerpo permanece acostado, le da golpes en el pecho y le limpia la boca con una toalla.
Heidy parece no reaccionar y, por el contrario, muestra más y más desespero. La enfermera la sienta en la cama, le sube las piernas que para ese momento empezaron a temblar y a salirse del lugar donde permanecía acostada. Más golpes en el pecho, le toca el estómago y la paciente no mejora.
La mujer sigue temblando, claramente se está ahogando. En ese momento, ingresan al cuarto una menor de edad, la mamá de Heidy y otra enfermera.
“Heidy, Heidy se está ahogando”, dice con desespero la mamá, una señora de la tercera edad.
La hermana de la paciente, llamada Gina, se sube a la cama e intenta ayudar para desatorarla. Parece ser demasiado tarde. Heidy no reacciona y la enfermera tampoco.
“Hagan algo, llamen a una ambulancia o algo”, dice Gina. Una de las mujeres del personal de salud le sube las manos, la otra toma el celular, la niña llora. Todo es un caos en esa habitación. Heidy, lamentablemente murió.
Por respeto a la familia, el video no será difundido en esta nota periodística. Sin embargo, SEMANA contactó a la hermana de Heidy, Gina Saldaña, quien denunció vehemente el mal proceder de las empleadas de Medicina y Terapias Domiciliarias.
SEMANA: ¿Qué pasó el día de la muerte de su hermana?
Gina Saldaña, hermana de Heidy Carolina Saldaña (G. S.): Nosotros en varias oportunidades les habíamos dicho a la empresa que una de las enfermeras llamada Fernanda no estaba capacitada y no servía. Mi hermana murió el 27 de enero y ese mes fui a una reunión con la jefa de enfermeras. Ella se dio cuenta de que la que habían asignado no tenía capacidad de mover a mi hermana, incluso, casi se le cae enfrente de las oficinas de MTD. No tenía manejo de silla de ruedas, ni armar ni desarmar. No sabía ni ponerle el humidificador a la bala de oxígeno, algo básico para una auxiliar de enfermería. Mi mamá, en medio de su frustración, un día le dijo a la jefa de enfermeras con rabia: “Este petardo me va a dejar morir a mi hija, la va a dejar ahogar”. Nosotros teníamos a otra niña fija que decidió pedir vacaciones antes de la muerte. Le pedimos mucho que nos las sacara porque el servicio no estaba estabilizado. Nos mandaron una niña para entrenamiento, pero se pegó al celular, cero disposición de aprender, y nos dejaron con Fernanda pese a las quejas. Fernanda llegó ese 27 a recibir el turno a las 7 de la noche y como media hora después le dio a mi hermana una avena que estaba supercolada, superpreparada, que siempre le hacía mi mamá con todo el cuidado del mundo. Mi hermana estaba en perfectas condiciones y se empezó a atorar, a toser. Lo que hace esta señora es acostarla, dejarle colgar la cabeza y más se ahoga. Le empieza a dar palmadas en el pecho. Mi mamá llega y le advierte que la debe levantar. Su ayuda fue cero. Incluso fue tan chismosa que fallecida mi hermana, llamó a otra compañera a decir que la paciente se había muerto. Cuando ni siquiera habían dado el certificado de defunción ya estaba acosando por irse, incluso pidiendo plata. Cero humanidad y empatía.
SEMANA: ¿Pusieron la queja en MTD?
G.S.: Por supuesto, mandé un mensaje y llamé a decirles que había pasado algo muy grave. Les dije que les exigía que le abrieran un proceso disciplinario y que no la envíen a otro domicilio hasta que no la capaciten, porque no tiene ni idea de primeros auxilios. Estábamos claros que mi hermana se podía morir, pero no de esa forma. La esclerosis lateral amiotrófica es una enfermedad huérfana, pero no tenía ni traqueotomía o gastrostomía. El lunes, después de lo sucedido, pongo la queja de nuevo. Me entero de que incluso la mandaron a la casa de un paciente que requería ventilación mecánica, justo a ella que ni primeros auxilios sabía. Me citan a una reunión y ahí me entero de que nunca se enteraron de todas mis quejas.
SEMANA: ¿Es decir, ya había puesto quejas antes?
G. S.: Sí, la primera vez que nos mandaron una auxiliar, llegó histérica, regañando. Yo mandé un email quejándome. La señora se durmió en una silla, se tapó con una cobija. Cuando llegué, mi hermana la estaba llamando hacía rato. Esa enfermera fue la primera que nos empezó a decir que la IPS no les daba descanso. Su actitud supergrosera. Intentaba comunicarme por el celular, por el WhatsApp, mandé quejas a la EPS. En una oportunidad duramos 10 días sin auxiliar. La IPS le echaba la culpa a la EPS y ellos les tiraban la responsabilidad de vuelta. En medio de mi desespero, posteé en las redes sociales y ahí se comunicaron conmigo. Nos reunimos, firmaron un compromiso, que no iba a volver a pasar. Pero siguió sucediendo. La excusa de eso es que no tenían personal. Una de las enfermeras maltrató a Heidy, mi hermana. Le pegó, la rasguñó, la dejó caer, nos gritó cuando le hicimos el reclamo, nos insultó. Yo la grabé en video y lo mandé a MTD. La sacaron de la empresa, pero nos mandaron a otra que, incluso, nos robó. Así pasaban cosas y la empresa se lavaba las manos.
SEMANA: ¿Cuál es la finalidad de esta denuncia pública?
G. S.: No quiero que a otros pacientes les pase lo que le pasó a mi hermana. Que no vayan los terapeutas, que los atiendan tan mal. Sé que familias más vulnerables, ni cuidadores ni enfermeras tienen. Mi hermana ya se murió y nada me la va a devolver, pero en la IPS tienen que tomar responsabilidad y no verlas como un número, sino como seres humanos. Muchas cosas de mi hermana la cubrimos un familiar y yo, pero también logramos la atención a mi hermana a punta de tutelas. Que les paguen a las enfermeras, que no les paguen tarde. Según decían ellas, hasta las amenazaban, por ejemplo, cuando pedían plata para los pasajes, les decían que si no llegaban, se quedaban sin trabajo. A muchos, según nos dijeron, no les han pagado la prima. No tienen al personal feliz. Las enfermeras que son buenas no las valoran. Además, quiero agregar que mi hija pequeña presenció todo. Estoy en terapias de psicólogo con ella. Mi hija vio todo, está asociando cosas que pasó la muerte de su tía con su día a día. Es una niña de 3 años y medio que no tenía por qué vivir eso.
¿Qué dice la empresa Medicina y Terapias Domiciliarias (MTD)?
SEMANA se contactó con la empresa en busca de una respuesta y enviaron un comunicado oficial que dice lo siguiente:
Heidy Carolina Saldaña, paciente de 44 años con diagnóstico principal ELA (esclerosis lateral amiotrófica), portadora de Bipap 24 horas, movilidad reducida, no presencia de úlceras por presión, caídas recientes, IAAS, asignación de auxiliar de enfermería 24 horas.
El pasado sábado 27 de enero en horas de la tarde, la paciente sufre un ataque (paro cardiorrespiratorio) en presencia de la auxiliar de enfermería asignada para el turno y su grupo familiar (cuidadores primarios). Se evidencia una reacción pasiva de parte de la auxiliar de enfermería y posterior reacción del núcleo familiar. Subsiguiente a esto, el paciente fallece en su domicilio. Medicina y terapias domiciliarias realiza las averiguaciones pertinentes, documentación de evento adverso y citación a descargos del personal presente en el domicilio. Se concluye que, pese a la formación técnica validada del personal de enfermería, su gestión y cuidado de múltiples pacientes con buenas prácticas, incluso con felicitaciones de varios domicilios.
Este personal no puede continuar en la organización dada su reacción pasiva, que no se puede asegurar como causa de muerte, pero que consideramos que no puede seguir siendo parte de nuestro equipo. Nuestra organización cumple con todos los procesos técnicos y validaciones formativas en la selección del personal, realiza seguimiento a los soportes de prestación y auditorías a los mismos. Pese a estos controles, este tipo de eventos adversos ocurren derivados de las patologías crónicas de nuestra población atendida.
Lamentamos lo sucedido con nuestra paciente y seguiremos implementando las medidas preventivas y correctivas para que la incidencia de los eventos adversos en este tipo de servicios siga siendo mínima. Ofrecemos servicios de alta calidad, generando bienestar a los pacientes y sus familias, consolidándonos como el mejor aliado de nuestros clientes.
Junta directiva MTD.