Un atroz crimen conmocionó al país esta semana. El coronel (r) de la Policía Nacional Élmer Fernández, director de la cárcel La Modelo, fue asesinado en el occidente de Bogotá el pasado 16 de mayo. El uniformado había asumido el cargo hace mes y medio.
Con el pasar de los días se han conocido nuevos detalles sobre el caso. El funcionario había recibido distintas amenazas de muerte a través de unos panfletos. Además, el pasado jueves 9 de mayo se presentó una grave situación a las afueras de la prisión, luego de que tres disparos impactaron en una pared del penal.
SEMANA pudo conocer que los investigadores del CTI, apenas llegaron al lugar de los hechos, apartaron al conductor del vehículo, una camioneta Nissan. El hombre fue montado en una camioneta para que brindara su versión de lo ocurrido.
El dragoneante, de acuerdo con lo que le dijo a las autoridades, indicó que se estaban movilizando con normalidad, el recorrido era común. Insistió en que no se presentó ningún contratiempo, ni siquiera en el momento en que se bajó del carro en la calle 63 el subdirector de la cárcel, el coronel en retiro Óscar Tovar Moreno.
El conductor del coronel (r) Fernández reveló cómo fueron sus últimos minutos de vida y qué pasó en el momento del ataque. Según contó, al sicario se le trabó el arma de fuego y por eso solo disparó en una oportunidad.
Finalmente, el hombre le detalló a la Fiscalía General de la Nación que el arma de fuego tenía silenciador, versión que ahora es parte de la investigación y entra en fase de corroboración. Hay que enfatizar que este es el principal testigo del atentado.
¿Qué había en el carro?
El primer informe de los investigadores del CTI reveló qué se halló dentro de la camioneta, una Nissan Kicks 2017, en la que iba el director de La Modelo.
De acuerdo con el reporte, al que tuvo acceso este medio, dentro del vehículo se encontraban las pertenencias personales del conductor y la víctima, incluidos sus respectivos teléfonos móviles. Además, hallaron un maletín con algunos documentos.
Las autoridades precisaron que al interior del carro, que está registrado en Madrid, Cundinamarca, no se descubrió nada relacionado con el atentado que acabó con la vida del coronel Fernández, quien estaba sentado en el lugar del copiloto.
En las fotos que dejó el ataque se puede apreciar cómo quedó el automotor. Las imágenes muestran que la bala atravesó sin problema el vehículo, que no contaba con ningún tipo de blindaje.
El funcionario llevaba poco tiempo en el cargo. Había asumido funciones el pasado 4 de abril y ya había ordenado las primeras medidas, como requisas en el patio cuatro, donde se encuentra detenido alias Pedro Pluma, al parecer el responsable de las amenazas que recibió.
“Supe de los ajustes y supuestos traslados por unos panfletos, pues en mes y medio ¡qué podría transformar! Solo podía seguir un nivel de trabajo que tenemos todos los integrantes del Inpec. No sé qué ajustes habrá hecho para merecer esto. A él lo asesinaron porque se están haciendo las cosas bien. Es más una cuestión de abandono con todo el Inpec”, concluyó Óscar Robayo, presidente de la Unión de Trabajadores Penitenciarios (UTP), en SEMANA.