Un video, que muestra cómo un ciclista se salvó de ser aplastado por un bus de Transmilenio en Bogotá, ha generado una gran atención y ha puesto de manifiesto el peligro que enfrentan los ciclistas en las calles de la ciudad. Este incidente en particular se suma a una preocupante estadística; 143 ciclistas han perdido la vida en Colombia en los primeros cuatro meses de 2023.
El hecho ocurrió en la carrera Séptima con calle 90 el pasado mes de mayo. Fabio Sandoval, el ciclista protagonista de este incidente, relató cómo el bus se cerró sobre él, lo golpeó y lo hizo perder el control de su bicicleta. Sin embargo, gracias a la agilidad del ciclista, logró evadir ser arrollado por las ruedas del bus. A pesar de haber sobrevivido, Sandoval sufrió lesiones que le llevaron a una incapacidad de 20 días.
Con gratitud y alivio, Sandoval expresó: “Gracias a Dios estoy vivo, contándoles esta historia”. Además, hizo hincapié en que en lugar de buscar culpables, es importante entender que todos somos parte de la vía y debemos asumir nuestra responsabilidad como actores viales.
Es cierto que, en muchos casos, los ciclistas también cometen imprudencias y no respetan las señales de tránsito. Algunos ignoran los semáforos en rojo, se desplazan en sentido contrario o no utilizan prendas reflectivas y luces que los hagan más visibles para los demás usuarios de la vía. Estas acciones irresponsables aumentan el riesgo de accidentes.
La Policía de Tránsito de Bogotá ha emitido recomendaciones para los ciclistas con el fin de prevenir accidentes. Estas incluyen el respeto de las normas de tránsito, no exceder los límites de velocidad, utilizar prendas reflectivas y asegurarse de contar con luces delanteras y traseras para incrementar su visibilidad. Estas medidas son fundamentales para que todos los actores viales puedan identificar a los ciclistas y evitar colisiones.
No obstante, también es importante destacar que las imprudencias no son exclusivas de los ciclistas. Los conductores de automóviles y motocicletas también son responsables de numerosos accidentes en las vías del país. A diario se pueden observar conductas irresponsables por parte de los conductores, quienes muchas veces no respetan las normas de tránsito y ponen en riesgo la vida de los ciclistas y peatones.
La falta de conciencia y respeto en las vías es una problemática que debe ser abordada de manera integral. Es necesario fomentar una cultura vial basada en la tolerancia, el respeto y el cumplimiento de las normas de tránsito. Además, se requiere una mayor inversión en infraestructuras seguras para los ciclistas, como ciclovías bien diseñadas y señalizadas, con el objetivo de promover la movilidad sostenible y reducir los accidentes.
El incidente captado en video donde un ciclista se salvó de ser aplastado por un bus de Transmilenio en Bogotá, evidencia la problemática de los accidentes de tránsito en los que los ciclistas son los más afectados. Tanto los ciclistas como los conductores deben asumir su responsabilidad y respetar las normas de tránsito. La policía de tránsito de Bogotá manifiesta que es necesario promover una convivencia vial segura y concienciar sobre la importancia de proteger la vida de todos los actores viales. Solo a través de un compromiso colectivo se podrá reducir la cantidad de tragedias en las calles y lograr un entorno vial más seguro para todos.