La vida de un niño emberá de tan solo 11 meses de nacido está en riesgo en el parque La Florida en Bogotá, pues requiere ser trasladado con urgencia a un centro médico para ser atendido y estabilizado, pero la comunidad indígena se opone.
SEMANA conoció en exclusiva que el menor lleva varias horas con una fuerte diarrea y vómito, y desde anoche su estado de salud es crítico, sin embargo, los padres del niño y demás personas de la comunidad emberá no solo se han opuesto a que el bebé sea trasladado a un centro asistencial, sino que tampoco han permitido que el personal de la Secretaría de Salud, que permanece las 24 horas en las instalaciones, pueda examinar al menor para poder dar un primer diagnóstico de qué es lo que tiene.
Desde anoche y hasta altas horas de la madrugada, los indígenas han realizado varios rituales para tratar de estabilizar al menor, pero hasta el momento nada de esto ha sido suficiente, por lo que la vida del niño corre un riesgo alto.
A esta hora de la mañana, el personal de la Secretaría de Salud continúa insistiendo en el Parque La Florida para poder llevar al menor a un hospital, pero los indígenas siguen sin permitirlo, por lo que se requiere con urgencia la mediación de funcionarios del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), sin embargo, hasta el momento, ninguno de ellos hace presencia en el lugar.
El traslado del niño a un centro asistencial es primordial si se tiene en cuenta que esta no es la primera vez que la comunidad indígena, que permanece asentada en La Florida o en la UPI La Rioja en el centro de Bogotá, se opone a que los menores con problemas de salud sean trasladados para recibir atención médica, lo que lamentablemente ha desencadenado en la muerte de varios de ellos.
Uno de los más recientes casos ocurrió en La Rioja, con un bebé de 9 meses de nacido. En su momento, la Secretaría de Salud informó que la niña y su núcleo familiar llegaron a Bogotá el 18 de enero de este año como consecuencia de las condiciones en sus lugares ancestrales, pero no reportaron la llegada ni el ingreso de la niña a La Rioja, quien ya venía con síntomas gastrointestinales.
Según lo explicado para la fecha de los hechos por las autoridades de la capital, desde el lunes 23 de enero de 2023, en los recorridos diarios que realizan los gestores de la Secretaría Distrital de Salud, se identificó a la menor con múltiples condiciones inadecuadas de salud, como desnutrición, múltiples lesiones en piel (escabiosis) y sospechas de malaria, entre otras.
“Por tanto, fue valorada en la ambulancia disponible (que está de manera permanente en la unidad) y por su condición, fue trasladada inmediatamente al Hospital Santa Clara. La menor de edad fue hospitalizada y recibió tratamiento por el equipo médico del centro asistencial. Pese a todos los esfuerzos, el miércoles 25 de enero de 2023 lamentablemente falleció”, relataron.
El domingo 22 de enero de este 2023, también se presentó la muerte de Darkiel Arce Viricha, un niño de 1 año y 7 meses de edad. El menor llevaba más de un año en seguimiento.
“El 14 de enero de 2022, personal de la Secretaría de Salud identificó en el Parque Nacional un grupo familiar con un menor de 7 meses de edad que nació en Bagadó (Chocó), asistido por una partera, y no contaba con el esquema de vacunación completo”, explicó el Distrito.
En el diario llevado por las autoridades también se registró que el 15 de enero de 2022, el menor de edad tuvo una atención médica en consulta externa de la Subred Centro Oriente con cuadro sugestivo de escabiosis. Para el 31 de enero, el niño fue trasladado al Hospital Santa Clara por presentar tos, fiebre y alteración en el patrón respiratorio.
“En el hospital recibió tratamiento médico y fue diagnosticado con bronquiolitis aguda, bronconeumonía, malaria (adquirida en el territorio de origen) y anemia moderada. El menor estuvo hospitalizado hasta el 15 de febrero de 2022. Tras el egreso de la unidad de servicios y regresar a la UPI La Rioja, un equipo de salud emberá de la Subred Centro Oriente hizo seguimiento diario del estado de salud del menor y se encargó de la administración del medicamento ordenado para tratar la malaria. Además, le dio continuidad al esquema de vacunación”, explicó el gobierno de Bogotá.
En conversaciones con la progenitora y según lo confirmado por los gestores en su momento, la familia había viajado en noviembre al departamento del Chocó por sus propios medios y retornaron el viernes 20 de enero del año 2023. Pero tres días después, a las 6:35 a. m., la familia de Darkie le informó al gestor comunitario que el pequeño estaba muerto.
A lo largo de 2022 fueron varios los casos que se presentaron de niños de la comunidad emberá que tuvieron problemas de salud y a raíz de la inoportuna atención médica por la oposición de la comunidad indígena para que fueran trasladados a centros médicos, finalmente fallecieron. Dado lo anterior, es por ello la importancia de que el niño que hoy miércoles 5 de abril permanece en la UPI La Florida pueda ser atendido de manera inmediata.