Por medio de un comunicado, la Policía Nacional aclaró la polémica generada por el retiro de 1.500 uniformados en Bogotá. En primer lugar, la entidad señaló que esto se debió a un convenio de hace dos años, por lo que no se trató de un engaño, como calificaron la decisión.
Los últimos días han estado marcados por roces entre la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, contra el presidente Gustavo Petro y el Gobierno, concretamente en asuntos relacionados con la seguridad. Durante la ceremonia de posesión por parte de la brigadier general Sandra Patricia Hernández Garzón como comandante de la Policía de Bogotá, celebrada el 30 de junio y llevada a cabo en la Plaza de Bolívar; la mandataria habló sobre los problemas de seguridad que afectan a la capital.
En el evento, la alcaldesa mayor intervino para recordar que los bogotanos pagaron con sus impuestos la formación y capacitación de 1.500 uniformados de la Policía, bajo el propósito de mejorar la seguridad de la capital. Sin embargo, ellos fueron trasladados a cumplir sus funciones en otras zonas del país.
“Señor presidente Petro, pagamos por la formación de 1.500 policías y nos los quitaron. Pedimos que nos los devuelvan”, reclamó López al asegurar que la capital tiene menos policías que hace siete años. En ese orden de ideas, la mandataria también recordó que el pago de impuestos ayudó a que el Gobierno hiciera inversión en las regiones. “Bogotá merece respeto, pero sobre todo protección”, declaró.
La alcaldesa indicó que contar con esos uniformados sería vital para la situación de hurto que vive Bogotá. “El hurto ha crecido en vez de disminuir; el año pasado tuvimos la menor tasa de homicidios, pero eso se ha perdido en estos seis meses, y ya está creciendo al 10%”, afirmó la mandataria. Igualmente, reiteró la solicitud en su cuenta personal de Twitter.
El tema generó polémica, por lo que la Policía Nacional se refirió al respecto para esclarecer la información. A través de su cuenta de Twitter, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, dio a conocer el comunicado emitido por la entidad, señalando que la Policía nunca engañó al distrito y que los compromisos se cumplieron acorde a las directrices.
En primer lugar, la Policía señaló que en 2021 se firmaron varios convenios con alcaldías de diferentes partes del país, mediante los cuales las administraciones locales se comprometieron a financiar parte de la formación de los nuevos uniformados, especialmente en el pago de la matrícula e insumos del equipamiento.
Con respecto a lo competente a Bogotá, la entidad afirmó que se acordó financiar la formación de 1.500 patrulleros y en una cláusula se consignó que la Policía no podía garantizar que la totalidad de los estudiantes aprobaran el proceso de formación, así como tampoco quedó estipulada la obligación de reemplazarlos.
“En cumplimiento del convenio, que entró en vigencia el 22 de noviembre de 2021 y finalizó el 31 de diciembre de 2022, se le entregaron a la administración distrital los 1.399 uniformados graduados y se explicó por qué no se hizo lo propio con los 101 restantes: 40 se retiraron y 61 fueron aplazados”, reveló el comunicado.
Finalmente, la Policía afirmó que cumplió a cabalidad con el convenio pactado tiempo atrás, haciéndole saber esto a la administración distrital. La reducción en el plantel de uniformados no solo ocurre en Bogotá, sino en todo el país, pero tiene razón por la dinámica institucional explicada, al igual que el retiro del personal que ha sido mayor al que ha ingresado.