Juan Felipe Reina, un joven universitario, fue una de las nuevas víctimas que en los últimos días dejó la inseguridad que se vive en distintos puntos de la ciudad de Bogotá. En esta ocasión, los hechos se presentaron en la conocida Zona T, ubicada en el norte de la capital del país.
Todo ocurrió hacia las 10 de la noche del pasado jueves 8 de febrero, día en el que el ciudadano había quedado de reunirse con algunos amigos en este sitio. Según le relató al periódico El Tiempo, él se encontraba en un bar, pero en un momento salió y se dirigió hasta el Oxxo de Cabrera, ubicado en la calle 85 con 14.
Allí, procedió a comprarse algo de tomar, decidió no ingresar de inmediato al bar, sino que se sentó en una de las bancas que hay en este punto. Tras algunos minutos, un hombre de color, que medía cerca de 1.80 y vestía chaqueta negra y camisa blanca, se acercó hasta donde él estaba.
“Se sentó al frente y me empezó a hablar, que qué más, que cómo va la noche. Yo había salido solo y en ese momento había muchísima gente en el parque, entonces no le vi ningún problema en hablar desde la distancia”, le comentó al medio.
A medida que avanza la conversación, el sujeto poco a poco se fue acercando al joven generando un poco de confianza, hasta el punto que en un momento le ofreció licor después de explicarle que, supuestamente, se encontraba con unos amigos, pero estos estaban en un casino apostando.
“Empezamos a hablar, a tomar, yo estaba tomando ‘pola’ y él me ofreció dos tragos de ron. Yo no le vi problema porque estábamos ahí en el parque con más gente”, indicó.
Las cosas se pusieron extrañas
Después de algunos minutos dialogando, Juan Felipe decidió devolverse al bar para encontrarse con sus amigos, pero aquí las cosas se pusieron un poco extrañas. El hombre se levantó con él y logró convencerlo para que caminaran juntos, nuevamente en el camino le ofreció licor, pero este ya le empezó a saber un poco raro.
“Esa copa fue un poco más almendrada, como anisada, rara, no era ron. Inmediatamente, mi instinto de supervivencia fue salir a correr, pero el man me dijo que estábamos tomando lo mismo”, comentó. Esta respuesta le volvió a generar confianza, pero hoy asegura que en ese momento, al parecer, “ya tenía algo encima”.
Caminaron juntos otros minutos, hasta que el hombre se encontró con un amigo. En ese punto, la víctima, según cuenta, estuvo consciente por cerca de 30 minutos, después de eso empezó su pesadilla.
Perdió el conocimiento
Poco a poco comenzó a advertir que estaba perdiendo la conciencia. En un momento, él alcanzó a sentir que su celular le estaba vibrando, por lo que lo sacó y le envió la ubicación suya a un amigo para que lo fuera a recoger, ya se encontraba en el parque El Virrey, pero en ese momento perdió por completo la noción de lo que estaba pasando.
A pesar de que no recuerda mucho, explicó que los supuestos delincuentes lo golpearon y robaron para después, hacia la 1 de la mañana, volver a llevarlo hasta el Oxxo en donde todo inició. “Tengo la frente súper golpeada, las rodillas golpeadas, los costados de los brazos con raspones”, comentó.
Afortunadamente para él, en el lugar había unas personas que lo auxiliaron y se lograron comunicar con su hermano para informarle lo que había pasado. Juan fue trasladado hasta la Clínica del Country donde, después de sospechar que estaba borracho, decidieron hacerle otras pruebas y constataron que tenía una sustancia en el cuerpo.
“Se dieron cuenta de que me habían dado escopolamina, me hicieron un TAC porque tengo un golpe muy fuerte en la cabeza, y como a las 6 de la mañana salí del hospital. Estuve unos días en reposo y ahora estoy tratando de organizar otra vez la vida”, manifestó.
En sus redes sociales, Juan Felipe precisó que prácticamente lo dejaron desnudo, le robaron su pantalón, las zapatillas, el teléfono y la billetera. El joven ya puso la respectiva denuncia en la Fiscalía y está a la espera de que su caso se resuelva y los delincuentes sean llevados ante la justicia.