Desde el pasado 24 de febrero, se decretó la emergencia ambiental en la capital del país como consecuencia del material particulado, el cual es producto de los diferentes incendios forestales en varias regiones de Colombia y en Venezuela, lo que está afectando la calidad del aire de Bogotá.
Durante las últimas horas, las condiciones mejoraron y, según pudo confirmar SEMANA con la Secretaría Distrital de Ambiente, la alerta emitida a raíz de la mala calidad del aire en Bogotá ya fue levantada.
En el primer reporte de este jueves, emitido desde la Secretaría de Ambiente, se detalló que Bogotá amaneció con condiciones moderadas en la mayoría de sus estaciones. El registro fue obtenido por la Red de Monitoreo de Calidad del Aire, donde solo una estación, Carvajal-Sevilla, presentó lecturas regulares.
Según expuso la entidad distrital, la reducción en la concentración de contaminantes se debe al cambio en las condiciones meteorológicas, como el cambio de la dirección de vientos, lo que ha permitido que el material particulado producto de incendios forestales no se mantenga en la atmósfera de la ciudad.
Vuelve el pico y placa solidario
“Acabamos de salir del comité técnico que está haciéndole seguimiento a la alerta ambiental en Bogotá con buenas noticias. A partir del mediodía de hoy, jueves, estaremos levantando la alerta ambiental fase I en la ciudad”, anunció la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.
La funcionaria agradeció el esfuerzo de los capitalinos e hizo un reconocimiento especial a organizaciones como Corabastos y de transportadores, pues las medidas adoptadas han surtido efecto y las condiciones en la calidad del aire han venido mejorando.
“A partir de mañana (viernes) ya se podrá utilizar el pico y placa solidario, los niños y niñas podrán hacer ejercicio en los colegios y jardines de la ciudad. Los pronósticos indican que estas condiciones favorables se van a mantener durante el fin de semana, no hay posibilidades de que declaremos una alerta en los próximos tres o cuatro días”, anotó la funcionaria.
Sin embargo, Urrutia comentó que, como es usual cada año, durante los próximos días se comenzará a sentir la influencia de las arenas del Sahara que vienen desde el continente africano por los vientos transcontinentales. De acuerdo con los pronósticos del Ideam, puede que los vientos se tornen más fuertes, aunque no impactarían la calidad del aire en Bogotá.
“Aunque hoy levantamos la alerta, las recomendaciones que les hacemos a los bogotanos son para todos los días: utilizar modos de transporte más sostenibles, recurrir al transporte público, a la bicicleta, a la caminata. Y si vamos a usar el vehículo particular, subir a la mayor cantidad de personas posible, no prender chimeneas y, en el caso de la industria, hacer esa transición a las tecnologías limpias, salir de los combustibles líquidos y sólitos hacia el gas o las tecnología eléctricas”, redondeó la funcionaria.
Para hacerle frente a la contingencia ambiental, la Alcaldía Mayor había anunciado el pasado 27 de febrero que el uso del tapabocas sería obligatorio en el transporte público, que no solo incluye el Transmilenio y los buses del SITP, sino también taxis, cables y buses intermunicipales.
“Bogotá continúa en alerta ambiental fase 1. Las condiciones para levantarla no se cumplen. Y, de hecho, hemos visto en las últimas horas mayor concentración de material particulado sobre la ciudad. En este momento tenemos nueve estaciones en condiciones regulares”, detalló Urrutia en ese momento.
Sin embargo, ahora que la alerta ambiental fue levantada, el uso del tapabocas en el transporte público vuelve a ser voluntario, aunque por precaución se recomienda mantenerlo. Así mismo, ahora que la contingencia ha sido superada, también vuelve con normalidad el pico y placa solidario.