La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, se prepara para hacer un nuevo cambio en su gabinete. Se trata de un relevo en la Gerencia de TransMilenio. Álvaro Rengifo, quien había asumido el cargo a comienzos de 2022, y su reemplazo será Orlando Santiago Cely. Su hoja de vida ya está publicada.
Santiago Cely es ingeniero civil de la Universidad Nacional, con especialización en Dirección y Gestión de proyecto de la Universidad Sergio Arboleda y magíster en Ingeniería - Transporte, también de la Universidad Nacional.
Actualmente y desde noviembre de 2021, Santiago Cely es director técnico de la Empresa Férrea Regional, entidad adscrita a la Gobernación de Cundinamarca. Anteriormente se desempeñó como asesor de la Dirección Técnica de Infraestructura y Vehículos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial.
Entre el 2017 y 2018, fue asesor de la Vicepresidencia de Estructuración de la Agencia Nacional de Infraestructura y anteriormente se desempeñó como asesor del Fondo de Adaptación.
No es la primera vez que Santiago Cely vaya a trabajar para TransMilenio, dado que durante siete años, entre el 2005 y 2012, fue profesional especializado de proyectos en la entidad.
Investigación por el puente Hisgaura
En relación con el trabajo que Santiago Cely desempeñó en el Fondo de Adaptación, vale mencionar que a mediados de octubre la Procuraduría General de la Nación le formuló cargos por irregularidades en el diseño del Puente Hisgaura, que se encuentra ubicado en el departamento de Santander, y que después de siete meses de haberse inaugurado presentó importantes afectaciones en su capa asfáltica.
La decisión disciplinaria también cobijó al entonces asesor del Fondo, Orlando Santiago Cely (2012-2017), y a los exgerentes de ese organismo, Carmen Elena Arévalo Correa (2012-2014) e Iván Fernando Mustafá Durán (2016 - 2018).
De acuerdo con la investigación, al parecer, Orlando Santiago Cely suscribió los estudios previos (Estudios y diseños a nivel fase III) para construir la mega obra, omitiendo incluir aspectos de carácter técnico; lo anterior ocasionó que la obra fuese inviable en la ejecución y estructuración durante la etapa de Pre-construcción.
Como consecuencia de las presuntas omisiones, se generaron sobrecostos en el rediseño por valor de $272.922.549 millones y se produjo un retraso considerable, pues la entrega estaba proyectada para el 12 de noviembre de 2016 y, finalmente, fue entregado hasta el 23 de enero de 2020, por parte del Fondo Adaptación al Invías.
El ente de control también cuestionó la conducta de Carmen Elena Arévalo, quien no habría velado porque los estudios previos, incorporados al contrato 285 del 27 de diciembre de 2013 y su anexo económico, no presentarán deficiencias técnicas sustanciales.
Señala el ente disciplinario que fue el contratista Sacyr Construcción Sucursal Colombia, quien en 2014, durante la fase pre-construcción, identificó las deficiencias técnicas de los estudios y diseños Fase Ill contenidos en los estudios previos y aportados por el Fondo Adaptación, que conllevarían a la inviabilidad de la construcción de la obra.
Para la Procuraduría, la investigada habría tomado “una posición omisiva, teniendo de presente la advertencia por parte del contratista, de que los diseños eran antitécnicos, es decir, que no realizó u desplegó acciones efectivas y sustanciales que permitiese aclarar la irregularidad de las deficiencias técnicas de los diseños recogidos en los estudios previos (…) dejando la carga en el contratista e interventores, estos últimos que instaron a Sacyr para continuar con la construcción de la obra con los diseños originales”.
Por último, el Ministerio Público endilgó cargos a Iván Mustafá, gerente del Fondo Adaptación (2016 - 2018), porque al parecer no habría adoptado, en su rol de director de la obra Puente Hisgaura, acciones efectivas preventivas en la construcción de la parte Superestructura, reduciendo el riesgo de deficiencias técnicas.