La Secretaría Distrital de Movilidad y la Iniciativa Bloomberg para la Seguridad Vial Mundial (BIGRS), presentaron las más recientes mediciones de los factores de riesgo vial de la Universidad Johns Hopkins.
De acuerdo con el estudio, el 42 % de los conductores en la ciudad no respeta el límite de velocidad establecido, siendo los motociclistas los que más incurren en esta conducta, pues 6 de cada 10, conducen por encima de la velocidad permitida.
El estudio también reveló que el aumento en la cantidad de motociclistas que sobrepasan los límites de velocidad, coincide con el incremento de muertes de estos usuarios en las vías de Bogotá, lo que da cuenta de los impactos de la velocidad excesiva en la siniestralidad vial.
Según datos preliminares, en lo corrido del año, con corte al 5 de septiembre, se han registrado 366 fallecidos por siniestros, de los cuales el 48 % eran usuarios de moto (conductores y acompañantes) y el 36 % eran peatones.
“De acuerdo con los análisis que realizamos desde la Secretaría de Movilidad, en 7 de cada 10 siniestros con fatalidades se encontró involucrada una motocicleta. Sin embargo, es importante recalcar que la problemática de exceso de velocidad es generalizada para todos los conductores, incluidos los de vehículos de 4 ruedas, pues encontramos que en el 40 % de los siniestros fatales de motociclistas hubo interacción de autos livianos y vehículos de carga” afirmó la Secretaria de Movilidad, Claudia Díaz.
“Aunque estas cifras resultan relevantes para los análisis de la Secretaría, es importante asumir cada una de las fatalidades y lesiones graves en las vías como un daño irreversible, no solo a una persona, sino para todo un núcleo familiar. Con esto queremos que toda la ciudadanía sea consciente de que en Bogotá las víctimas no son solo una cifra” agregó la secretaria de Movilidad.
Los análisis de la Universidad Johns Hopkins evidenciaron que la gran mayoría de motociclistas usa el casco correctamente. Este porcentaje se ha incrementado desde el 75 % en septiembre de 2017 al 94 % en febrero de 2024.
En cuanto al uso del cinturón de seguridad, se identificó que el 80 % de ocupantes de vehículos de 4 ruedas usan este elemento de retención. Sin embargo, es preocupante el bajo porcentaje de usuarios que usan el cinturón en la parte trasera de los vehículos, con una participación del 12 %.
Para Andrés Vecino, investigador de la Universidad Johns Hopkins, la correlación entre el exceso de velocidad y la cantidad de muertes de motociclistas en el tránsito que tiene Bogotá es un fenómeno que también está presente en otras ciudades de la región.
“Con datos comparativos entre 2022 y 2023, encontramos que en las ciudades en las que aumentó el porcentaje de motociclistas que excede el límite de velocidad permitido, también incrementaron las muertes de estos actores viales, como es el caso de Quito, Guadalajara, Campinas y Recife”, dijo.
“Confiamos en que los notables esfuerzos de la ciudad, sobre todo en el área de control, puedan hacer que la prevalencia del exceso de velocidad disminuya, tal y como sucedió hace unos años. Está demostrado que los controles son una estrategia efectiva para disuadir este comportamiento de riesgo y por ende, las muertes en las vías. Seguiremos realizando estos estudios de manera periódica para que las autoridades puedan seguir tomando decisiones informadas para salvar vidas”, añadió Vecino.
Por su parte, el secretario de Salud, Gerson Bermont, se refirió a las implicaciones de la siniestralidad vial en la salud pública de la ciudad: “Esta es una problemática que absolutamente todos podemos prevenir. Las conductas inadecuadas en las vías nos están llevando a perder más de 500 vidas al año y a tener más de 17 mil personas con discapacidad, situaciones que afectan la salud y la de sus familias. Desde la Atención Primaria Social estamos trabajando en los entornos comunitarios, institucionales y educativos para incidir en el cambio de las conductas y generar una mayor responsabilidad de los actores viales en las vías de Bogotá”.
Dentro del Plan Distrital de Desarrollo ‘Bogotá Camina Segura’, la Secretaría de Movilidad tiene como meta reducir las fatalidades en un 15 % entre el 2024 y el 2027.