Toda una tragedia vive la familia de un patrullero de la Policía de Bogotá quien, en las últimas horas, el 9 de septiembre anterior, se quitó la vida al encontrar a su expareja con el compañero sentimental dentro de un motel en la capital del país, en la localidad de Kennedy. La mujer, a su turno, dijo que ella ya no era pareja del uniformado y dio cuenta de videos y chats en los cuales quiso dejar en evidencia el acoso del que era objeto.
De acuerdo con una primera versión, Jhon Jairo Acuña, patrullero de la Policía en Bogotá, obtuvo la información sobre el lugar donde estaba su esposa con y su acompañante y decidió ir a corroborar con sus propios ojos que su expareja estaba con otra persona.
Al llegar al sitio, el policía comprobó que la mujer, con la que había compartido su vida, pero que ya no eran pareja, estaba con otro hombre. La Policía Metropolitana de Bogotá indicó: “Lamentamos profundamente un caso que se presentó en la localidad de Kennedy. Pasa exactamente en una residencia, cuando se tiene conocimiento de que una pareja, que se encontraba en este lugar, fue agredida mediante arma de fuego”.
El coronel Juan Arango, oficial de inspección en la institución, agregó: “La persona causante de este hecho se quitó la vida y, posteriormente, se tiene conocimiento del estado de salud de los agredidos, quienes están fuera de peligro. De la información inicial que se obtiene, se puede considerar que el agresor era la pareja sentimental de la ciudadana que se encontraba en este sitio”.
El patrullero Acuña llevaba más de 10 años de servicio en la Policía, y para el caso de Bogotá, había sido asignado a diferentes Centros de Atención Inmediata (CAI) en la capital del país. “Esto es una tragedia”, dijo uno de los conocidos del uniformado. “Acuñita se nos fue”, mencionó otro de los compañeros que no podía creer lo que había sucedido.
Ahora bien, la mujer, Paola Camargo, les mostró a los colegas de Noticias Caracol chats en los cuales queda en evidencia cómo el uniformado fallecido la acosaba y le pedía que le respondiera a sus mensajes.
De igual manera, aseguró la mujer, ella conservó videos en los que se prueba que el patrullero que era su pareja le pegó. Las imágenes dan cuenta de cómo la tomó a la fuerza y ella intentó separarse.
Otra imagen que ella dio a conocer deja ver cómo una persona sacó una pistola para intimidar. De acuerdo con Camargo, quien sacó el arma fue su expareja y se la mostró al hijo de ella ante el supuesto pedido de él de que no molestara más a su madre. Sobre estos hechos, Camargo no informó que haya interpuesto las denuncias respectivas.
De acuerdo con su relato, ella estaba en la intimidad con su nueva pareja, con la cual está desde diciembre de 2023. “Estuvimos en el hotel, sentí los disparos en mi cara. Fueron tres impactos en mi cara, uno en el brazo, otro le rozó a mi compañero, a Fernando, la persona con la que yo estaba. Él vio cómo yo estaba botando por la boca sangre y dije: ‘Ya, me mató, definitivamente’, y él se mató”.
Varias horas después de lo ocurrido, todavía se pregunta cómo el uniformado de la Policía supo que ella estaba en ese sitio. Y, más extraño aún, es que asegura que —segundos después de los disparos— la familia del hombre llegó como si lo estuviera acompañando.
“Apenas él se dispara, salen la mamá, el papá, la hermana, la sobrina, del hotel, entonces no entiendo ese pedazo. No entiendo por qué llegaron ahí todos, no entiendo cómo sucedió eso. Cuando él se disparó, salió la mamá corriendo”, señaló la mujer, quien atinó a decir que duró un año con el uniformado que se quitó la vida.
Las autoridades anunciaron la puesta en marcha de las respectivas investigaciones y acompañamiento psicológico a la familia del uniformado fallecido y a la pareja sobreviviente.