Luis Francisco Cante Céspedes, director de la Región Andina de Migración Colombia, fue llamado a imputación de cargos como presunto responsable de acoso sexual en contra de sus subalternas. El caso fue revelado el pasado 11 de noviembre por SEMANA.
En la investigación se cita la denuncia hecha por la trabajadora de Migración Colombia que aseguró que entre los meses de febrero y septiembre de este año, Cante Céspedes aprovechó su superioridad jerárquica para ejercer presiones indebidas y asedio continuo con fines sexuales no consentidos, además de realizar comentarios machistas y sugestivos.
Pese a que solamente se cuenta con una denuncia, la Fiscalía General advirtió que existen más casos, por los que invitó a las víctimas a realizar las debidas denuncias. ”Los elementos de prueba dan cuenta de que estas conductas ilícitas, al parecer, se repitieron con otras mujeres”, sostuvo el ente investigador por medio de un comunicado.
En la actualidad la denunciante recibe asistencia psicológica. Por estos hechos, la Fiscalía le imputará a Cante Céspedes el delito de acoso sexual.
El infierno en Migración Colombia
El reportaje publicado por SEMANA reveló una decena de testimonios contra Cante Céspedes, así como la protesta pacífica que adelantaron más de 50 empleadas, entre ellas trabajadoras de oficios varios, guardas de seguridad y agentes de atención al usuario, para rechazar los casos de abuso sexual y laboral.
En lo corrido del presente año, según narraron, han vivido un infierno constante dentro de las instalaciones de la sede de Migración Colombia. Cante Céspedes, economista de profesión, llegó a la entidad a finales de 2022, después de que Carlos Fernando García fue nombrado director nacional. Ambos pertenecieron al M-19, la misma guerrilla del presidente Gustavo Petro.
Bajo la sombra del presidente se ha escudado para atacar a sus subalternos, como se lo reveló a SEMANA María Camila Suárez, exfuncionaria del área de Extranjería, quien dice que Cante Céspedes estaría alardeando sobre su poder y cercanía con el presidente Petro.
“Nos contó que él debía estar en otro puesto, ganando 20 o 30 millones de pesos. Decía que era amigo de Petro. Que él podía hacer y deshacer, que el presidente lo defiende”, manifestó Suárez.
Suárez denuncia acoso en el área de Extranjería, donde laboró por dos años, bajo el liderazgo de Danny Fabián Pereira: “Todo empezó bien, pero empezó a informar que el grupo no tenía abogados y que por eso no le servía para nada. Eso nos lo dijo dos veces”, aseguró.
Luego, según manifiesta, el coordinador comenzó a dividir al grupo en torno a rencillas y a enviar un mal mensaje de sus desempeños.
“Dice en los pasillos que su grupo es una mierda, que no sirve para nada”, contó la mujer, versión que fue sustentada por otra funcionaria.
Incluso, cuenta que Pereira le quitó el liderazgo sobre un pasante con comentarios misóginos: “Me dijo que me quitaba a uno porque a los hombres sí se les puede exigir y a las mujeres no. Para él solo sirven los hombres”.
Este ambiente hizo que una compañera se quejara ante el director de la regional sobre la situación en su equipo: “Él le respondió que amigo el ratón del queso”.
Suárez dice que fue retirada de su cargo por denunciar acoso laboral: “Pereira y Cante son uña y mugre. Quien los moleste, sale. El director regional les acolita todo”.
Además, asegura que Cante no actúa frente a denuncias de agresiones sexuales contra las trabajadoras: “Una contratista fue víctima de acoso sexual por parte de un compañero. Le contó a Talento Humano y a Cante. Su respuesta fue que así se trabaja con hombres, que aguante”.
“No sabe tratar a la gente. No veo ningún cambio. Veo más opresión, persecución. Todos son machistas”, agregó sobre el director regional.
Los sindicatos dicen que Cante cuenta con ocho procesos internos por acoso laboral y uno por sexual. Migración habla sobre un total de cuatro reportes.
SEMANA conoció dos de las denuncias elevadas, una de ellas de una trabajadora que asegura haber sido constantemente perseguida y acosada sexualmente por Cante.
La mujer, en conversación con este medio, aseguró que todo comenzó con un comentario de Cante frente a otros compañeros. “Comentando sobre un operativo, en el que según él había que bajar de un helicóptero en cuerda, dijo: ‘Uy, ¿ustedes se imaginan a ella bajando en hilo por un tubo?’. Mis compañeros se apenaron y yo quedé inmóvil”, narró la mujer.
Las trabajadoras afirman que Cante las mira de forma que ellas califican como “morbosa”. Incluso, aseguran que haría rondas por el edificio con el único objetivo de verlas cuando se les permite ir de ropa casual.
“Se queja porque vamos en ropa casual, nos dice a gritos que se puede prestar para malos entendidos, pero siempre hacía comentarios sobre la ropa que llevamos. ‘Estás como para…’, ‘Hermosa’, ‘Me encantan esas rayitas’, y demás”, dijo la mujer.
Ella cuenta que se percató de que el director bajaba a diario a su oficina. Dice que la estrujaba con abrazos, le tocaba los hombros y jugaba con su cabello sin su consentimiento. Incluso, en ocasiones la tomaba de las manos.
“Hablaba de forma sugestiva, diciendo ‘uy’. Jugaba con la trenza que me hacía en el cabello, diciendo que estaba como para ‘uy’. Era muy insistente. Mis compañeros se percataron de la situación y me avisaban cada vez que iba a la oficina. Uno decía ‘pasaporte’ cuando Cante se acercaba, con el fin de que yo corriera al baño”, dijo.
La mujer llegó a su límite el día que la acusó con su jefe directo de vestirse de forma inapropiada.
“Se paró junto a mí. Creo que estaba mirándome los senos desde arriba. Me miraba de arriba abajo. Pasaron diez minutos en eso. Me estaba morboseando. Regañó a mi coordinadora diciéndole que ‘tenía las tetas por fuera, con un escote hasta el ombligo’”, contó.
Ella fue hasta la oficina de Cante a aclarar lo ocurrido, pero terminó siendo tocada sin consentimiento.
“Quería decirle que estaba bien vestida. Se atrevió a tocarme, me jaló la camisa hacia abajo para decirme hasta donde tenía el escote. Después me dijo que fue un malentendido. Me tocó las manos, violando mi espacio personal, para decirme que no pasaba nada”, contó, entre lágrimas, la víctima.
SEMANA también conoció denuncias de trabajadores con condiciones médicas a quienes les impiden hacer esfuerzos o tareas prolongadas. Una mujer dice que intentó expresar sus necesidades al director regional, pero este habría reaccionado de manera agresiva.
“Nunca en mi vida pensé ser víctima de discriminación por presentar una condición médica, amenaza y de cierta forma persecución sindical por parte del coordinador de extranjería, compañeros y en especial de Cante Céspedes, director actual de la Regional Andina”, dijo la mujer, que teme represalias, calificando a su jefe como un “patán”.
SEMANA habló con Francisco Cante, quien negó todas las acusaciones en su contra. Sostiene que quedó “sorprendido” cuando la funcionaria radicó una queja por acoso sexual.
“Es absolutamente falso. Quedé sorprendido por la queja. En toda mi vida, 33 años de manejo de grupos, jamás he tenido una queja por acoso laboral o sexual. La queja está en la Procuraduría y estoy dispuesto a afrontar el debido proceso”, dijo Cante.
Frente a los posibles acercamientos y palabras sugestivas, negó haber saludado a sus subalternas ni siquiera con contacto físico: “Nunca he vulnerado un derecho a alguna funcionaria. Tengo mi conciencia tranquila”.
Habló sobre la protesta con camisetas en las instalaciones, la cual dice apoyar: “Estoy de acuerdo con protestar. Están en su derecho. Esta semana hay una campaña sobre el tema. Desconocía que era contra mí”.
De su altercado con la funcionaria con condiciones médicas especiales lo calificó como “reclamo” por haber presentado una denuncia contra él sin sustento. Finalmente, aclaró que es cercano al presidente Gustavo Petro por ser desmovilizado del M-19, pero asegura que no tiene contacto con él actualmente.
SEMANA le preguntó a Migración Colombia de forma directa sobre el caso de Danny Fabián Pereira, frente al cual se limitaron a negar las agresiones verbales contra las funcionarias.
“En ningún momento se ha incurrido en expresiones misóginas o discriminatorias contra ningún funcionario, sea hombre mujer, en la Regional Andina. Los requerimientos que se hacen son de manera general para el cumplimiento de horarios y de los trámites y actividades que se desarrollan diariamente y que deben cumplir los funcionarios públicos”, respondió la entidad, que decidió contestar a través de una vocería oficial.
Este medio intentó ponerse en contacto con Pereira, pero no se obtuvo respuesta. Luego se recibió una petición del funcionario, en la cual niega haber hecho comentarios misóginos contra una subalterna.
“Niego categóricamente –porque jamás ocurrió– haber incurrido en conductas misóginas y haber pronunciado la frase que ustedes, sin fórmula de juicio alguna, me atribuyen. No es verdad que yo haya dicho alguna vez, en público o en privado, que “(...) A las mujeres no se les puede exigir y a los hombres sí”, manifestó en la carta.
El caso de acoso sexual se encuentra en Fiscalía, se exploran acciones legales por el despido injustificado de Suárez y otros cuatro procesos de acoso laboral podrían llegar a la Procuraduría en los próximos días. Las mujeres de Migración se cansaron de callar.