A la cárcel fue enviado un hombre de 55 años junto con su hijo de 33, luego de ser capturados en flagrancia en medio de un atraco que dejó una religiosa gravemente herida; el violento hecho se registró en el municipio de Floridablanca, en Santander.
Un juez de control de garantías tomó la decisión al advertir el peligro que representan estos hombres, quienes fueron identificados como Sigifredo Enrique Arévalo Herrera y Sigifredo Enrique Arévalo Armesto, para la sociedad.
Así mismo, según se conoció, la Fiscalía les imputó cargos por los delitos de hurto calificado y agravado en grado de tentativo, en concurso con fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego; los cuales pese a la contundencia de las evidencias presentadas por las autoridades no aceptaron.
Así fue el atraco
La mañana del pasado viernes, 9 de junio, la religiosa Posidia Sandoval Abril y su sobrina Yenny Alexandra Sandoval Camacho se dirigieron a una entidad bancaria, ubicada en el casco urbano del municipio de Floridablanca, de allí retiraron cerca de tres millones de pesos.
La diligencia transcurrió con normalidad y las mujeres salieron del banco. Minutos después, hacia las 11:34 a.m., llegaron a un establecimiento comercial ubicado en la carrera 9 con calle 3 del casco antiguo. Allí ocurrió el terrible suceso de inseguridad, el cual quedó registrado en cámaras de seguridad.
Al parecer, ni la religiosa ni su sobrina se percataron que los delincuentes, quienes se movilizaban en motocicleta, las estaban siguiendo y analizando todos los movimientos que realizaban. Justo cuando creyeron tener la oportunidad perfecta, los ladrones atacaron.
En las imágenes se observa como el parrillero (hijo) descendió de la motocicleta e ingresó al establecimiento, luego se acercó a la religiosa e intentó despojarla del bolso donde llevaba el dinero. La mujer de inmediato reaccionó y comenzó a forcejar con el delincuente, así mismo Yenny Alexandra intervino para defender su tía. En lugar, además, se encontraba un menor de edad y otra mujer.
Tras ver que la religiosa no soltaba el bolso, el delincuente desenfundó un arma de fuego y le propinó dos disparos en la pierna izquierda; así mismo, la sobrina también fue golpeada en el rostro. Ante la violenta situación, testigos del hecho reaccionaron y comenzaron a perseguir a los delincuentes, quienes se dieron a la huida sin el dinero.
Sigifredo Enrique Arévalo Herrera, de 55 años, fue alcanzado a escasos metros del lugar; la turba enardecida lo golpeó y quemó la motocicleta de placa HYV-33F en la que se movilizaba. Mientras que Sigifredo Enrique Arévalo Armesto, de 33 años, fue detenido cuando intentaba escapar por la vía antigua, también fue golpeado.
Padre e hijo fueron entregados a la Policía y capturados. De acuerdo con las autoridades, el arma que emplearon en el atraco era una traumática que había sido modificada para aumentar su letalidad. “La modificaron para agregarle balas de plomo que perforan la piel y por supuesto pueden causar mucho daño”, dijo el coronel Óscar Manrique, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bucaramanga.
El coronel Manrique agregó que: “Rechazamos todo acto de violencia contra las mujeres, sobre todo cuando estos hechos ocurren en medio de hurtos en la modalidad de atracos, en ese sentido la estación de Policía de Floridablanca logró la captura de dos delincuentes en flagrancia que momento antes habían despojado de sus pertenencias a dos ciudadanas, una de ella religiosa, utilizando un arma de fuego que fue accionada por este delincuente hiriendo a la ciudadana en una de sus piernas”.
La religiosa Posidia Sandoval Abril fue auxiliada y trasladada a un centro asistencial, donde fue sometida a una intervención quirúrgica; tres días después fue dada de alta y actualmente se recupera satisfactoriamente.
Adicional a esto, las autoridades revelaron que los dos capturados son oriundos de Soledad (Atlántico) y habían llegado hace una semana al área metropolitana de Bucaramanga. Además, estaban siendo buscados por el delito de hurto y el hijo tenía la medida de prisión domiciliaria.