La Ciudad Bonita, en cabeza de Juan Carlos Cárdenas Rey, alcalde la ciudad, fue invitada especial de la Asamblea General de la ONU que se desarrolló en Nueva York, Estados Unidos. El mandatario aprovechó el espacio para hablar de la migración venezolana, la protección del Páramo de Santurbán, los actos de celebración por los 400 años de fundación de la capital santandereana y los logros del Plan de Desarrollo 2020-2023.
De acuerdo con la intervención de Cárdenas, los proyectos de megaminería que se pretenden desarrollar en inmediaciones del Páramo de Santurbán son un peligro latente tanto para los ciudadanos como para la preservación del agua, dado que 15 municipios del departamento de Santander y 33 de Norte de Santander se abastecen del agua de este ecosistema. Además, involucra gran parte del Lago Maracaibo en Venezuela.
“Nosotros estamos comprometidos con la defensa de un ecosistema único de agua dulce, como son los páramos de nuestro país. Estamos enfrentando esa defensa de proyectos megamineros que ponen en riesgo no solo el agua, sino la vida de cada uno de nuestros habitantes. Esto lo menciono porque ese ecosistema llega hasta la zona de Maracaibo en Venezuela. Estamos buscando anticiparnos a un posible fenómeno migratorio que se puede dar en los próximos años por la escasez del agua, que al final es la escasez de la vida misma”, dijo el mandatario en la ONU.
Asimismo, el alcalde indicó que Bucaramanga es una de las ciudades más incluyentes y que alberga un gran porcentaje de población migrante de Colombia, teniendo en cuenta que el 40 % de las personas que viven en la Ciudad de los Parques, no son nacidas en la ciudad o no tienen padres bumangueses.
“Esto es un fenómeno que viene sucediendo de mucho tiempo atrás, (...) es fundamental que esta población migrante asuma nuestra ciudad como propia, tiene que sentir que es su ciudad, que no están en un lugar lejano; porque en la medida que haya apropiación del territorio da como resultado la defensa del mismo, el cumplimiento de derechos y deberes”, agregó.
El pasado martes 17 de mayo se dio apertura al primer Centro Intégrate de Colombia para migrantes y retornados, ubicado en Bucaramanga en el Centro Cultural del Oriente. Asimismo, se tiene registro de que cerca de 10.000 niños estudian en las instituciones educativas de la ciudad.
“Somos una ciudad abierta al mundo, abierta a las personas migrantes y desplazadas. Abierta al intercambio cultural, comercial y a los derechos humanos. Estamos preparados para recibir a los extranjeros que quieran llegar a progresar y avanzar. Lo que esperamos nosotros siempre es que se cumplan las reglas y normas de respeto y tolerancia”, enfatizó Cárdenas.
En la ciudad de la mano de organismos internacionales se ve la migración no solo como una oportunidad sino como una realidad, bajo el legado de la construcción de una ciudad de oportunidades para todos y todas; como está evidenciado en el Plan de Desarrollo 2020-2023. Esta invitación histórica de Bucaramanga se da también en el marco de los 400 años de la ciudad.
“No queremos prejuicios que generen violencia o no valoren la diferencia, esto genera una cultura agresiva que afecta a las mujeres y personas sexualmente diversas. Por eso, si tienen empresas, pueden ayudarnos a contratar población migrante”, concluyó Cárdena en la sesión de la ONU.