A partir de este miércoles 1 de marzo comienza a regir el nuevo aumento en el precio de la gasolina en la ciudad de Bucaramanga, según lo establecido por el Gobierno nacional, esto con la intención de disminuir el impacto fiscal del Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles (FEPC).
De acuerdo con el Ministerio de Minas y Energía, en la capital santandereana el valor del galón de gasolina corriente aumentará 406 pesos, es decir este combustible pasará de 10.519 pesos a 10.925 pesos. Mientras que el precio del ACPM no se ajustará y su precio continúa en 9.125 pesos.
“Para marzo de 2023, el precio de venta al público de la gasolina corriente en las diferentes ciudades del país, salvo en Pasto y el resto del departamento de Nariño, se ajustará en $ 400 por galón, ubicándose en promedio en $ 10.766 por galón”, señalaron el Ministerio de Minas y Energía y el Ministerio de Hacienda.
Con respecto a las ciudades, la Circular 018 de la Comisión de Regulación de Energía, Gas y Combustibles (Creg) permite identificar que Villavicencio continúa siendo la más impactada por el alza en la gasolina, por lo que en esta zona del país se comercializará el galón más costoso ($ 11.273), seguido de Cali ($ 11.207), Bogotá ($ 11.173), Manizales ($ 11.162) y Pereira ($ 11.150).
“El incremento en el precio de la gasolina pretende disminuir el impacto fiscal del Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles (FEPC) sobre el Gobierno por la dinámica de los precios internacionales de los refinados, que han aumentado debido a factores internacionales como el precio del petróleo y el nivel de riesgo global que afectó la tasa de cambio en el país”, agregó el Ministerio de Hacienda.
Con respecto a los precios del ACPM, la cartera nacional dejó en claro que mantendría los mismos valores, teniendo en cuenta que este es el insumo principal de los transportadores y cualquier cambio en sus costos de operación se traduciría en un alza directa en los precios finales al consumidor, haciendo que suba más el costo de vida.
Es de mencionar que pese a este nuevo ajuste, Colombia sigue teniendo uno de los precios de la gasolina y de diésel más baratos de Latinoamérica, debido a las operaciones del FEPC y que a su vez “ha mitigado la presión inflacionaria de los incrementos de los precios del petróleo y sus derivados en los últimos meses”, explicó la cartera nacional.
No obstante, desde que Gustavo Petro asumió como presidente de Colombia la gasolina ha subido aproximadamente $1.650 por lo cual, la preocupación de los colombianos es hasta cuándo se mantendrán estos incrementos.
Frente a este tema, la respuesta que ha dado el Gobierno nacional es que estos seguirán presentándose durante esta administración, hasta lograr una disminución en el déficit que registra el Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles, que se calcula supera los 30 billones de pesos.
“De no haber contado con la operación del FEPC en lo corrido de 2023, el precio de la gasolina corriente y del ACPM se hubiera ubicado, en promedio, en más de $5.000 y $9.800 por encima del precio de venta promedio vigente por galón, respectivamente”, afirmó el Ministerio.