No cesa la violencia en el departamento de Santander. En las últimas 24 horas en la ciudad de Bucaramanga y en el municipio de Barrancabermeja, se registraron cuatro ataques a bala que dejaron sin vida a dos personas y otras siete, entre ellas un menor de edad, resultaron gravemente heridas.
El hecho más reciente se presentó en el sector conocido como Sapo Escondido, en la comuna siete de Barrancabermeja. Allí Faber Barraza Cuadro, al parecer irrumpió de forma violenta en una vivienda con la intensión de presuntamente robar. Versiones preliminares indican que ingresó al inmueble e intentó sacar varios objetos de valor, sin embargo en medio del escape fue atacado a disparos.
“Se presentó un homicidio, al parecer, relacionado con un intento de hurto. Un habitante de calle presuntamente intentó ingresar a una residencia y el dueño de la misma, le disparó en dos ocasiones. En este momento nuestro componente investigativo se encuentra realizando las labores de campo”, explicó el Mayor Nicky Jhon Erazo, comandante de la estación de Policía de Barrancabermeja.
En el barrio La Paz, de la comuna tres, fue asesinado Keiver Alberto Mejía. Esta persona, quien era conocida con el alias del Guajiro, recibió varios impactos de bala por sujetos desconocidos que lo interceptaron cuando desempeñaba sus labores como vigilante informal.
Con la muerte de Keiver Mejía ya son 22 personas que pierden la vida de forma violenta, principalmente en medio de ataques sicariales, en el municipio de Barrancabermeja.
En la comuna cinco, justo en el barrio Nueva Esperanza, dos sicarios que se movilizaban en motocicleta interceptaron a Juan Camilo Palacios, de 19 años, y le dispararon. El joven alcanzó a correr y logró evitar los delincuentes acabaran con su vida; sin embargo, sí fue herido.
Tras el ataque, el sicario escaparon del lugar, mientras que el cuerpo de Bomberos auxilió y trasladó a Palacios a un centro asistencial donde se encuentra bajo observación médica, pero estable.
Horas después, una disputa entre bandas delincuenciales por el control territorial del microtráfico desató una balacera en el sector del Parque de Los Chivos, en el Barrio el Boston de la comuna seis. En medio del enfrentamiento resultó herido José Diego Poveda Ceballos, alias quien recibió impactos de bala (dos en la espalda, uno en la pierna y otro en la costilla derecha).
En el mismo hecho, una bala perdida alcanzó a un niño de 11 años, quien recibió un disparo en la región axilar muy cerca del hombro. El menor de edad se encontraba frente a su vivienda, cuando fue herido, así mismo se conoció que es hijo de un Policía.
Tanto Poveda Ceballos como el niño fueron trasladados a clínicas del municipio, donde se encuentran fuera de peligro.
“Estamos adelantando las investigaciones respectivas para esclarecer estos hechos violentos en Barrancabermeja. Junto con la Fiscalía analizamos información entregada por testigos de los casos que podrían estar relacionados con temas del microtráfico”, agregó el mayor Jhon Erazo.
Sobre el medio día del martes, nuevamente en la comuna cinco pero en el barrio La Esperanza se registró otro enfrentamiento con arma de fuego, que dejó dos heridos; uno de estos por bala perdida.
Los sicarios, según versiones preliminares, pretendían acabar con la vida de Wilfredo Mejía, quien recibió dos balazos (uno en el brazo y otro en la región lumbar) tras ser perseguido varios metros por los gatilleros. En medio de la persecución, una de las balas hizo blanco Darío Chaparro de 53 años, quien se encontraba sentado frente a su vivienda. El hombre recibió el disparo en una pierna.
Una vez pasó el peligro, Mejía fue trasladado hacia la Clínica Magdalena y Chaparro hacia Hospital Regional del Magdalena Medio, de estas personas por ahora se desconoce su estado de salud.
En Bucaramanga
Momentos de pánico se vivieron en el barrio Nápoles, ubicado al norte de Bucaramanga, la noche del lunes cuando un hombre armado disparó en repetidas ocasiones contra dos jóvenes que departían en la cancha de dicho sector.
Hacia las 8:50 p. m., llegó un sujeto desconocido al escenario deportivo y sigilosamente caminó hacia Joan Nicolás Flórez Avaonza y Andrés Julián Tarazona Ayala, una vez se acercó lo suficiente a los jóvenes, desenfundó un arma de fuego y les disparó varias veces hasta dejarlos gravemente heridos.
Flórez Avaonza y Tarazona Ayala, quienes presuntamente estaban consumiendo sustancias estupefacientes al momento de la agresión, fueron trasladados por uniformados de la Policía hasta el Hospital Universitario de Santander (HUS), donde los dos fueron sometidos a intervenciones quirúrgicas. Sin embargo, se encuentran estables y fuera de peligro, indicaron las autoridades.