Después de avalar un preacuerdo entre la Fiscalía y Juan Sebastián Gómez Rosas, el Juzgado Décimo Penal del Circuito de Bucaramanga lo condenó a 20 años de prisión por los delitos de acceso carnal en persona puesta en incapacidad de resistir agravado y pornografía con menor de 18 años.
El docente, quien sería el fundador de Applicate, una escuela de tecnología, fue denunciado e investigado por haber abusado sexualmente de varios estudiantes en la capital santandereana, durante 2021. Los niños, menores de 11 años, además de ser sometidos a los vejámenes, fueron grabados por el hoy condenado.
“Él aceptó los términos del preacuerdo con una pena de 20 años de prisión. Como eran cinco tipos penales de concurso homogéneo de acceso carnal, se estableció una pena por el primero de 16 años de prisión y un año por cada uno de los concursos homogéneos sucesivos para un total de 240 meses de prisión”, explicó la defensa de las víctimas.
Y agregó que: “Con posterioridad a la aprobación del preacuerdo, de inmediato el juez emitió la sentencia, de la cual él fue notificado, y no se apeló. Es decir, esta persona tendrá que pagar dicha condena de manera intramural porque no se consideró ninguno de los subrogados penales. A la fecha no puede tomarse otra decisión al no ser apelado el fallo del juez; en este momento quedó en firme”.
Así las cosas, Juan Sebastián Gómez Rosas estará recluido en la cárcel Modelo de Bucaramanga, donde se encuentra desde noviembre de 2021, durante los próximos 20 años.
El caso
De acuerdo con la investigación adelantada por la Fiscalía, Juan Sebastián Gómez Rosas habría fundado Applicate, una escuela de tecnología, con la supuesta intención de enseñar artes digitales a estudiantes de prestigiosos colegios de Bucaramanga y a niños de bajos recursos, a quienes al parecer engañaba diciéndoles que estaban subsidiados por parte de una fundación de España.
“Él seleccionaba a los estudiantes de su preferencia, les brindaba más atención que a los demás e incluso los invitaba a clases personalizadas para indagar más sobre sus vidas. A los niños les daba regalos con el objetivo que ganarse la confianza de ellos y de sus padres”, dijo a SEMANA la hermana de uno de los niños afectados (de esta persona, reservaremos su nombre por seguridad).
En medio de dichas clases, el docente, “de acuerdo con el relato de las víctimas, les imponía retos que los menores debían cumplir, los cuales terminaban en prácticas sexuales que eran grabadas. Se hallaron más de 300 archivos de video con material pornográfico”, explicó en su momento la Fiscalía.
El profesor fue capturado por funcionarios del CTI con el apoyo del Ejército en un conjunto residencial del sector de Provenza, en Bucaramanga. En medio del operativo le fue incautado material pornográfico guardado en dispositivos digitales hallados en su vivienda.
Los retos, según contaron las víctimas, se hacían por semanas y era tal la manipulación que ellos debían preguntar cuál sería la siguiente prueba para ser beneficiados por la supuesta fundación española.
La primera semana les vendaba los ojos a los niños. Luego, les ponía un aparato bucal; en la tercera semana los ataba de pies y manos (repitiendo todo lo anterior). Una vez los menores de edad estaban inmovilizados, el profesor Gómez Rosas presuntamente los ponía a adivinar el sabor de algunas bebidas e, incluso, presuntamente, se masturbaba frente a ellos y los fluidos los echaba en sus bocas.
Todos estos vejámenes eran grabados por el mismo docente, quien al parecer luego vendía este material pornográfico en el mercado negro de internet.