Hay luto en el municipio de Cimitarra, en Santander, tras la pronta partida un niño de 12 años en medio de un paseo familiar. La trágica situación, al parecer, se presentó en un pequeño descuido de las personas que lo acompañaban. Las autoridades investigan lo ocurrido.

La lamentable situación se presentó este fin de semana en un balneario, ubicado en la vereda La Jota, donde departía la familia. Todo marchaba bien hasta que el niño sufrió una crisis de salud (convulsión), mientras jugaba en la piscina con otros miembros de su familia, por lo cual terminó hundiéndose.

El pequeño, al parecer, sufría de ataques de epilepsia. | Foto: Captura de video redes sociales.

Una cámara de seguridad del lugar captó el angustiante momento que vivió la familia. En las imágenes, se observa cómo -de inmediato- varios jóvenes logran tomar al niño y sacarlo de la piscina, al tiempo que alertan al resto de la familia de la situación.

Una vez el pequeño está afuera, una mujer comienza a realizarle maniobras para reanimarlo. Segundos después, fue llevado hasta el Hospital San Juan de Cimitarra; sin embargo, para ese momento ya era demasiado tarde e ingresó sin signos vitales.

“El niño estaba departiendo con su familia. Ellos (niños) estaban jugando, la señora estaba muy pendiente de él, pero en cuestión de segundos el menor se alejó de donde estaba el resto. No fue que el niño se tiró del tobogán y perdió la vida, así no fueron las cosas. Cuando yo hablé con la tía me dice que el niño sufría ataques de epilepsia y por eso ella estaba muy al pendiente”, contó a un medio local Rosalba Meza, administradora del balneario.

De acuerdo con la administradora del lugar, tanto pronto la familia del niño se percató que no estaba “comienzan a buscarlo en todas partes, pero no se les ocurrió mirar debajo del agua, y cuando se percataron estaba debajo del agua, ya muerto”.

En el hospital Integrado San Juan de Cimitarra se confirmó el deceso del menor de edad. | Foto: Hospital Integrado San Juan.

Aunque la principal hipótesis de este hecho hace referencia a muerte por inmersión, como consecuencia de los problemas de salud del niño, las autoridades de Santander adelantan las respectivas indagaciones para establecer las causas exactas.

Este es el segundo caso de muerte por inmersión que se presenta en Santander, en lo corrido de este mes. Pues cabe recordar que tras despedir el año, el primero de enero una familia de Barrancabermeja perdió a uno de sus integrantes en medio de un paseo.

La trágica situación se presentó el pasado domingo primero de enero en un balneario, ubicado en inmediaciones de la ciénaga San Silvestre. Versiones preliminares indican que la víctima estaba acompañado de familiares y amigos cuando ocurrió el lamentable suceso.

Al parecer, el niño “estaba en la orilla, de un momento a otro se sumergió y los papás comenzaron a buscarlo, pero lo encontraron ya sin vida”, contó un testigo del hecho.

Una vez el niño fue sacado del agua, personal de Bomberos Voluntarios lo trasladó hasta la Policlínica, donde lastimosamente se confirmó el deceso. La víctima fue identificada como Luis Ángel Guzmán, de cuatro años.

Entre tanto, las autoridades aseguraron que iniciaron las respectivas indagaciones para esclarecer este lamentable hecho que enluta a una familia santandereana.

Ocurrió en la Ciénaga San Silvestre | Foto: A.P.I.

Por otra parte, la comunidad barranqueña sostiene que en dicho balneario se han presentado varias situaciones similares, presuntamente por el descuido de los padres con los hijos, toda vez que los adultos tienden a distraerse realizando otras actividades.

“Esto ocurre por descuido de los padres, cada fin de semana se ven muchos niños bañándose ahí solos porque los padres están tomando. Los niños hay que cuidarlos y las tragedias como estas hay que evitarlas”, dijo un ciudadano.