Este fin de semana se cumple un mes del violento y doloroso fallecimiento de Luz Dary Surmay Muñoz, una mujer de 36 años que el pasado 17 de agosto fue víctima de la delincuencia que azota a Bucaramanga (Santander). La familia continúa clamando justicia a las autoridades.
Aquel miércoles 17, hacia las 9:50 p. m., Luz Dary se movilizaba en una motocicleta de placas KNQ 155 por la calle 93 con carrera 34, justo al frente del centro comercial Cacique, cuando dos sujetos a bordo de otra moto se acercaron a ella para presuntamente despojarla de sus pertenencias.
Versiones preliminares indican que uno de los ladrones habría intentado raparle el bolso a Luz Dary, situación que la llevó a perder el control del vehículo y, a su vez, caer aparatosamente sobre la vía.
La mujer quedó gravemente herida, mientras que los atracadores escaparon a toda velocidad del lugar. Minutos después, Luz Dary fue traslada hacia la clínica Bucaramanga, donde ingresó cómo N. N. a una unidad de cuidados intensivos (UCI) debido a un trauma craneoencefálico severo.
Pese al esfuerzo médico, no logró reponerse del brutal golpe y falleció sobre las 9:30 a. m. del jueves 18 de agosto. Desde entonces, la familia de Luz Dary, quien trabajaba en el área de producción y programación del canal Tro, no ha tenido paz. Pues el caso continúa en “impunidad” y la investigación se hace cada vez más lenta, según dicen.
“A nosotros como familia no nos han dicho nada, no hemos recibido ningún informe oficial de qué pasó esa noche. Lo único que dicen es que están trabajando, pero no se ven resultados de nada. Esto fue una muerte violenta, hay un video donde se ve que le rapan el bolso y sus pertenencias, mi hermana ingresó a la clínica como N. N., porque no tenía ningún documento de identificación”, dijo Leyland Surmay, hermana menor de Luz Dary.
El ataque contra Luz Dary, dice la familia, dejó en evidencia una vez más la ola de inseguridad que se vive en Bucaramanga y la violencia que, en diferentes formas, sufren las mujeres en la cuidad, mientras que los criminales continúan como si nada en las calles buscando más víctimas.
“No sé si las autoridades están esperando que suceda otro hecho igual, que la delincuencia acabe con otra vida. Ya pasó un mes y todo sigue en impunidad, es realmente doloroso. Cuando las autoridades hagan su trabajo, logren identificar y capturar a quienes le arrebataron la vida a mi hermana, lograremos tener un poquito de tranquilidad. Necesitamos que la persona que nos hizo este daño pague, para que ninguna otra familia pase por lo mismo”, agregó Leyland.
Tras un mes intenso dolor y sufrimiento, la familia Surmay Muñoz hace un llamado a las autoridades para que den celeridad a la investigación y así poder evitar que otras familias pasen por situaciones similares. Así mismo, piden a las personas que presenciaron el hurto, los contacten o la entreguen información a las autoridades para que pueda avanzar la investigación.
“Hacemos un llamado para que tomen las medidas necesarias y garanticen la seguridad de la ciudad. Los culpables de este hecho deben recibir una condena ejemplar, que se marque un precedente, como familia necesitamos justicia”.
El próximo domingo 18 de septiembre se realizará una misa en memoria de Luz Day, en la iglesia Nuestra Señora del Carmen, en Costilla (Cesar).
“Ella era mi compañera de vida, compartíamos todo el tiempo porque vivíamos juntas. Entonces es muy duro perderla de un momento a otro de esta manera tan cruel. Acostumbrarme a la ausencia de ella es muy doloroso y el dolor se intensifica al ver que las autoridades no hacen nada. Mi hermana era una persona muy alegra, siempre tenía una sonrisa para todo, nada le robaba la calma ni la tranquilidad. Pero, la delincuencia le robó la vida en un momento, era un alma muy buena”, concluyó con la voz entrecortada Leyland.
Cabe recordar que la Alcaldía de Bucaramanga ofrece una recompensa de diez millones de pesos para que la ciudadanía dé información clave que permita esclarecer lo ocurrido.