Este fin de semana se registró en Santander quizás uno del los hechos más sanguinarios y aterradores de la historia del departamento. Ocurrió en zona rural del municipio de Landázuri, ubicado al sur occidente de la región y a 286 kilómetros de Bucaramanga.

La masacre se presentó en una finca de la vereda Buenos Aires, donde se encontraba al parecer reunido Álvaro Díaz Pineda y cinco personas (cuatro hombres y una mujer) de nacionalidad venezolana, estos últimos en hechos confusos se convirtieron en los verdugos de toda una familia.

“Ocurrió a las 3:00 de la madrugada de este domingo en el corregimiento Plan de Armas, sector Miralindo, donde fueron asesinados cuatro integrantes de una misma familia. Uno de ellos, el señor Álvaro Díaz, quien era docente, su esposa y dos hijos, un joven de 20 años y una niña de 13 años”, explicó John Jaime Ruiz, secretario del Interior de Santander.

Álvaro Gómez Pineda, su esposa Loiden Acuña Pérez, su hija Karen Julieth Díaz Acuña (13 años) y su hijo Juan Sebastián Díaz Acuña (20 años) fueron las primeras víctimas mortales. En este hecho otra persona resultó gravemente herida con arma blanca. Se trata de Natalia Calle, quien era la empleada de la familia Díaz Acuña; ella logró huir de los agresores y alertar a la comunidad del escabroso crimen.

Una vez se conoció la magnitud de la masacre, residentes de la zona rural de Landázuri se organizaron y desplegaron una búsqueda por zonas aledañas al lugar del crimen. Al poco tiempo la comunidad logró ubicar a los señalados homicidas y tomaron justicia por mano propia.

“La gente se tomó la fuerza de mano propia y pues acabó con la vida de los cinco asesinos que causaron esta tragedia. Hasta el momento hay uno que no lo han encontrado, pero por información de la misma comunidad se dice que está muerto”, aseveró en este medio Marlon Ballén, alcalde de Landázuri.

Así las cosas, en menos de 24 horas en Landázuri nueve personas, entre estas una niña, perdieron la vida en hechos extremadamente violentos. Y una más permanece luchando por sobrevivir en el hospital municipal, bajo protección de la Policía.

Ante esta violenta situación, que ha consternado a toda una región, las autoridades realizaron este lunes un consejo extraordinario de seguridad en el cual se tomaron medidas para esclarecer esta situación.

“Ley seca y toque de queda. Prohibida en toda la jurisdicción de Landázuri la venta y consumo de bebidas embriagantes de domingo a lunes, de 6:00 p. m. a 7:00 a. m., del día siguiente. La Policía ejercerá todas las funciones de control”, dijo el alcalde municipal.

Así mismo, este lunes 12 de septiembre se expidió el decreto 059, “por medio del cual se rinden honores póstumos y se decretan tres días de luto municipal por los sensibles fallecimientos de los integrantes del núcleo familiar Díaz Acuña y se ordena izar la bandera municipal a media asta”.

En ese sentido, los días 12, 13 y 14 de septiembre fueron declarados como duelo municipal. También se invita a la comunidad a poner una cinta negra en sus viviendas en señal de luto por la muerte inesperada y violenta de esta familia.

Este lunes, 12 de septiembre, también se realizó en el parque municipal una velatón en memoria de la familia Díaz Acuña, en la cual participaron centenares de lugareños y familiares de la víctima.