Un nuevo hecho de sangre sacudió al municipio de Mogotes, en Santander, donde en las últimas horas un presunto hurto terminó con un hombre muerto. Al parecer, la situación se habría presentado en medio de un acto de defensa propia, indicaron las autoridades locales.

Eran las 3:10 a. m., del domingo 23 de octubre, cuando la presencia de un sujeto extraño alteró la tranquilidad de la vereda San Roque Bajo, ubicada a una hora del casco urbano; las mascotas de los residentes, los perros, comenzaron a ladrar hasta que los lugareños se despertaron.

Tras los ladridos de los caninos, un agricultor decidió salir a mirar qué ocurría. Sin embargo, lo hizo armado con una escopeta. Esta persona, de acuerdo con el relato que entregó a las autoridades, comenzó a escuchar ruidos extraños que provenían de un cafetal.

Una vez se acercó lo suficiente, al parecer habría visto a un hombre hurtando café en sus predios, por lo cual accionó el arma de fuego contra el supuesto ladrón, a quien impactó en el pecho. La herida le causó la muerte de inmediato a este presunto delincuente.

“Según las primeras informaciones obtenidas, con base en testimonios, esta persona (víctima) de 40 años presuntamente habría ingresado a una propiedad privada, al parecer para hurtar café, ante lo cual el propietario del predio reaccionó disparando hacia el cafetal. En circunstancias que son materia de investigación, el hombre que allí estaba recibió un disparo que terminó cobrando su vida”, explicó la Policía de Santander.

Junto al cuerpo, al parecer se habrían hallado elementos utilizados para la recolección del grano y varios kilos de este. Al sitio acudió personal de la Sijín de la Policía, que se encargó de realizar la inspección y el levantamiento del cadáver.

Así mismo, en medio de la diligencia forense, el presunto homicida “se entregó de manera voluntaria a las autoridades y puso a disposición el arma de fuego, una escopeta sin documentos”, agregó la Policía.

Ante este tipo de hechos, las autoridades de Santander reiteran el llamado a la comunidad para no tomar justicia por mano propia.

Cabe recodar que, en Mogotes, el pasado 11 de octubre fue asesinado Miguel Villalba Carreño, luego de enfrentarse con un joven de 19 años, al parecer en medio de un hecho de intolerancia.

La violenta situación se presentó en la calle 6 con carrera 9, a cuatro cuadras del parque principal, donde en la tarde el miércoles 12 de octubre, Miguel departía al parecer con quien minutos después se convirtió en su verdugo.

Estos dos hombres, en hechos que son materia de investigación, comenzaron a discutir y en segundos pasaron a las agresiones físicas. Los dos habrían esgrimido armas blancas y luego salieron a la vía pública para enfrentarse.

Entre lance y lance, el joven de 19 años logró herir a Miguel Villalba; le asestó una puñalada en el cuello. Este hombre, de 51 años, se desplomó sobre la vía y aunque varias personas habrían intentado auxiliarlo, perdió la vida de forma inmediata, según informaron las autoridades.

“La comunidad nos alertó de un hecho de intolerancia y al lugar se trasladaron unidades del modelo nacional de vigilancia comunitaria por cuadrantes, cuyos uniformados lograron la captura en flagrancia en el sitio del señor Luis Carlos Murillo Muñoz, de 19 años, quien sería el presunto autor material del homicidio del señor Villalba”, explicó la coronel Ruby Leonor Pinzón, subcomandante de la Policía de Santander.

Murillo Muñoz fue dejado a disposición de la autoridad competente como presunto responsable del delito de homicidio agravado.