Las constantes lluvias que se siguen presentando en todo el departamento de Santander han dejado graves emergencias, como inundaciones, desbordamiento de ríos, derrumbes y, entre ellas, seis personas han perdido la vida, siendo cuatro menores de edad.

Durante el mes de mayo han sido varias las afectaciones que se han presentado en diferentes municipios tanto del área metropolitana de Bucaramanga, como en otras partes de la región, donde además miles de familias han quedado incomunicadas por derrumbes en los puentes.

El primer incidente se registró en la madrugada del pasado 12 de mayo, en el municipio de Piedecuesta, Santander, en la vereda Mesitas de San Javier, en la vía que conduce a la Mesa de Los Santos.

Desafortunadamente, como producto de un deslizamiento de tierra, una roca de gran magnitud cayó sobre una vivienda, justamente donde dormían dos menores de edad ocasionándole la muerte.

“La roca cae sobre una de las menores, causándole la muerte de manera inmediata y otra menor fue auxiliada por bomberos de Piedecuesta y fue enviada a un centro asistencial, donde posteriormente fallece horas después”, indicó en su momento a SEMANA el director de la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres de Piedecuesta, William Javier Niño.

Las víctimas de este suceso, ambas de nacionalidad venezolana, fueron identificadas como Dailyn Alondra Altuve Fernández, de once años, mientras que la menor lesionada que falleció en la clínica, se trataría de Estefany Daylin Altuve Fernández, de 13 años.

La segunda emergencia se registró el pasado 18 de mayo, en el municipio de El Carmen de Chucurí, en Santander, donde se registró otra avalancha en la que dos personas perdieron la vida tras quedar sepultadas bajo un alud de tierra.

Como Reinaldo Pedraza Gamboa, de 52 años, y Myriam Vázquez Uribe, de 42, fueron identificadas las víctimas de esta emergencia ambiental; la pareja de esposos residía en la vereda Nueva Granada, donde se registró un gran deslizamiento de tierra que los sepultó en su propia vivienda.

Así mismo, este fenómeno natural afectó a otras 20 familias, destruyó un puente vehicular en el sector conocido como La Habana y generó afectaciones viales en la zona rural del municipio.

En hechos similares, se presentó la tercera emergencia donde perdieron la vida dos menores de edad tras ser arrastrados por la corriente del río Chagres, en el municipio de Charalá, Santander, el pasado 19 de mayo.

Un grupo de estudiantes residentes en la vereda El Resguardo se detuvo en Puente Bahondo. Allí, en medio de juegos y bromas, se retaron a ingresar al río Chagres, con el fin de demostrar quién era el más “valiente”. Sin embargo, no midieron el peligro y el desafío terminó en desgracia.

“Cinco muchachos iban para sus casas luego de salir del colegio, pero en el camino se detuvieron a jugar, hicieron un reto para saber quién era el más valiente en tirarse al río –esto es una costumbre que tienen muchos jóvenes acá– y se lanzaron dos; cuando iba a tirarse el tercero, miró hacia atrás y se dio cuenta de que venía la corriente y no lo hizo, hubiese sido peor la tragedia”, explicó Edilson Arenas, alcalde de Charalá.

La angustiante situación fue presenciada por otros compañeros que se encargaron de alertar a los habitantes del sector y a la Policía. Tan pronto las autoridades y los organismos de socorro recibieron el reporte, iniciaron la búsqueda de los menores.

Sin embargo, no fue hasta el pasado viernes 20 de mayo, donde después de varias horas de búsqueda, fue hallado sin vida Iván Camilo Merchán Díaz, de 14 años y en horas de la tarde del lunes 23 de mayo, los organismos de socorro lograron hallar el cuerpo sin vida de Fabián Andrés Marín Díaz, de 16 años.

Por otro lado, permanece desaparecido Luis Eduardo Figueroa Flórez, de 69 años, quien fue arrastrado por la creciente del río La Cascajera, en el municipio de El Carmen de Chucurí.